Rosario Emprende: más de 300 emprendedoras y emprendedores recibieron su certificado de capacitación
La Municipalidad de Rosario entregó este martes diplomas a más de 300 emprendedoras y emprendedores que se capacitaron a través de Rosario Emprende, programa enmarcado en el Plan Cuidar que involucra a los seis distritos de la ciudad. El encuentro se concretó en el Centro Cultural Fontanarrosa (San Martín y San Luis) y estuvo enfocado en El trabajo en el marco de la economía social.
En el hall del entrepiso del CCF se dispuso una mesa para la entrega de certificados para las y los emprendedores y se sirvió un desayuno. Luego, dio inicio el acto con la proyección de un video con testimonios de participantes del programa, a cuyo término se habilitó una mesa panel con la presencia del subsecretario de Economía Social del municipio, Pablo Nasi Murúa, y de emprendedoras y emprendedores de diversos perfiles: un productor asociado en cooperativa, una feriante, una huertera y un apicultor. El conversatorio estuvo guiado por el periodista Leonardo Farhat que se enfocó en las experiencias de trabajo de las y los invitados.
En el cierre de la actividad estuvo presente el secretario de Desarrollo Humano y Hábitat, Nicolás Gianelloni, quien expresó: “Construimos juntos el programa Rosario Emprende, que ya lleva vigente siete años. Estamos muy contentos porque es un sueño poder hacer una actividad con tanta gente, donde puedan conversar y conocer las experiencias de otros, lo cual incentiva y da fuerzas”.
Y agregó: “Junto al intendente Pablo Javkin trabajamos en la reconstrucción de Rosario después de la pandemia y la economía social estuvo en los momentos difíciles. Este programa surgió en el 2001 y fue una idea que tuvo, en su momento, Hermes Binner, de pensar al trabajo desde otro lugar. Hay muchas formas en las que se organiza la economía y la economía social es una de ellas en la Argentina”.
En este punto, Gianelloni remarcó que la economía social tiene mucha importancia en la ciudad: “En muchos de los parques de la ciudad hay feria de emprendedores, ya forma parte del paisaje urbano. Cuando uno va a los barrios los vecinos nos piden poder empezar el curso del ABC, armar una cooperativa”, a la par que afirmó: “Siempre digo que la gente en los barrios no nos pide planes sociales, nos pide trabajo”.
“Es una de las formas de trabajo que reivindicamos porque los ciudadanos quieren emprender, construir un proyecto, una huerta, por eso valoramos el esfuerzo y el compromiso de todos los rosarinos para salir adelante con su propio esfuerzo”, destacó, a la par que remarcó que “el objetivo del Programa Rosario Emprende es que el Estado le pueda dar las herramientas a las y los emprendedores y ser un aliado de cada emprendimiento que surja en los barrios”.
Para concluir, el secretario manifestó: “Quiero agradecerles a los disertantes que seguramente contando sus experiencias nutrieron al resto de los emprendedores. El ejemplo de ustedes es lo que queremos para la ciudad y eso nos permite darle más fuerza a todo lo que se viene. Es una luz de esperanza”.
Por su parte, el subsecretario de Economía Social, Pablo Nasi Murúa, subrayó: “Todos los días hay emprendedores que nos marcan el camino que tenemos que tener como Estado y tengo el orgullo de conducir un equipo que en la pandemia estuvo en la trinchera”.
El funcionario sostuvo que “hay que celebrar el encuentro en el trabajo como una herramienta de lo cotidiano, y como gestión municipal apostamos a que cada uno de los emprendimientos sean una fábrica en un barrio porque alimenta a una familia”.
A continuación agradeció la confianza de los emprendedores: “Hay que entender que estamos generando trabajo en Rosario. Cuando van a una feria van a comercializar lo que producen”, y cerró: “Son 1.000 familias las que trabajan cotidianamente en la ciudad y en los últimos años se multiplicaron. La feria la da el municipio pero la construyen las y los emprendedores. Además, los coordinadores de ferias que hacen un trabajo muy importante, como los equipos territoriales”.
Voces de las y los emprendedores invitados
Joaquina Dominga Sotelo es huertera y una de las convocadas para participar en la mesa panel. Recordó que sus abuelos le enseñaron el oficio desde chica, a la par que contó: “En la huerta tengo verduras aromáticas y medicinales, además hacemos plantines. Es todo orgánico. Me costaba al principio porque sabía cómo trabajar pero no cómo vender. Por eso me sirvió poder hacer el curso”.
Jorgelina es diseñadora de indumentaria (@darkqueens.rosario) y tiene prendas de estilos punk, rock y gótico, entre otros. “Son diseños únicos. Empecé con la pandemia. Siempre hice sastrería y me puse a hacer cosas para mí. Terminé el curso de ABC que me ayudó a sacar los costos, los gastos. Todo lo hago yo, desde la moldería, el corte y la terminación del producto”, aseguró.
Joel se dedica a hacer panificados y empezó el curso el año pasado porque se quedó sin trabajo. “Hago pan casero, con chicharrón, pre pizzas, son unas ocho horas o más de trabajo diario y me ayuda mi esposa. Hice el curso de ABC que me ayudó muchísimo y fue muy importante”.
Roberto es apicultor desde hace 35 años y aseveró que a pesar de ser un trabajo que tiene sus sacrificios lo que prima es la felicidad. “Estoy acá porque me encontré con este sistema de la economía social del municipio que me dio un respaldo para la comercialización en las ferias y encontré estabilidad económica”.
El emprendedor remarcó que el trabajo se hace en equipo. “Tengo 6 millones de abejas. En una colmena pueden convivir desde 30.000 hasta 120.000. Trabajo en la zona de la isla, cerca de Casilda y de Rosario, entre otros lugares”, explicó y abundó: “Las formas productivas mejoraron y va acompañado con el desarrollo de las colmenas desde octubre hasta febrero, aproximadamente. Se cosecha en abril, después se envasa en tambores y se separa la miel para fraccionar y vender en las ferias, también a negocios y bares”.
Plan Cuidar
El Plan Cuidar involucra al Estado municipal en la organización política y social del cuidado como actividad esencial para el bienestar de la población, en un marco de corresponsabilidad entre los sectores público y privado, en comunidad y al interior de las familias.
El cuidado abarca el conjunto de actividades tanto remuneradas como no remuneradas que garantizan el bienestar de las personas, e implica un apoyo multidimensional: material, económico, moral y emocional.
La iniciativa implica, por un lado, la unificación de todos los equipos, recursos y acciones del Estado municipal para trabajar en forma conjunta la inclusión y el cuidado de las personas que más lo necesitan en cada uno de los barrios de la ciudad y, por otro lado, la convocatoria a todas las organizaciones de la ciudad a sumarse a esta red de cuidados y trabajar en las líneas de intervención del plan.