Escuelas sin gas: aseguran que se debe a un corte “masivo e indiscriminado” de Litoral Gas y reclaman por falta de controles
Osvaldo Biaggiotti, delegado del Ministerio de Educación en Rosario, se refirió a las protestas que estudiantes llevaron a cabo para exigir que les conecten el servicio de cara a la temporada de frío. Y apuntó contra la empresa y las regulaciones que impiden habilitaciones.
Alumnos de la escuela de educación técnica profesional N° 469 “Estanislao Zeballos” se manifestaron este miércoles al mediodía en España al 100, frente al establecimiento educativo, para reclamar soluciones por distintas deficiencias estructurales y apuntando fundamentalmente contra la falta de gas para calefaccionar durante la temporada de frío. Y el Ministerio de Educación apuntó a Litoral Gas.
Los estudiantes, tanto del turno mañana como del de la noche, afirmaron que tienen que llevar “frazadas porque hace un frío inhumano”, y que desde el Estado no se elaboró un plan de obras con el tiempo suficiente como para garantizar el suministro de gas, o una mejora en las instalaciones eléctricas, que permitieran asistir a clases en mejores condiciones.
Para responder al reclamo de los jóvenes, Osvaldo Biaggiotti, delegado regional del Ministerio de Educación en Rosario, habló en Radio 2 y aseguró que este martes mantuvieron una reunión con ellos y otros estudiantes y que les brindaron una respuesta.
“Se las dimos personalmente ayer, los convocamos formalmente a todos los centros de estudiantes”, dijo y sostuvo que unos 40 adolescentes de distintas secundarias estuvieron reunidos con ellos en la delegación ministerial. “Les dijimos que estamos abocados a resolver una cuestión con la que realmente no contábamos”, agregó.
Corte “masivo e indiscriminado”
Para justificar la situación, Biaggiotti apuntó contra una “decisión unilateral” de la empresa Litoral Gas: “Entre febrero y marzo, han cortado el suministro de modo masivo e indiscriminado de todas las escuelas en las que corroboraron alguna irregularidad, de acuerdo a normas que entraron en vigencia a partir del 2019″.
Según explicó, desde la empresa distribuidora de gas debían realizar inspecciones en las escuelas para constatar que la infraestructura estuviera en condiciones, pero ese proceso se demoró. “Argumentan que no pudieron hacer la verificación durante la pandemia porque no disponían de las cuadrillas suficientes”, señaló el funcionario.
“Lamentamos que no se haya podido acordar un programa más progresivo que nos permitiera a nosotros del mismo modo poder ir dando respuesta. Ahora nos vemos obligados a dar respuesta a varias decenas de casos al mismo tiempo”, reconoció el delegado.
Por otro lado, apuntó que fue “el propio gobernador” de Santa Fe, Omar Perotti, quien “ha dicho que ninguna escuela se quedaría sin gas en su gestión”, y prometió: “En los próximos meses vamos a estar dando respuesta a todos los casos sin condicionamientos presupuestarios. El presupuesto está garantizado, cueste lo que cueste en cada caso”.
“Pueden ser 50.000 pesos o cinco millones”, apuntó sobre las demandas presupuestarias para resolver la problemática de falta de gas. Precisamente, en la escuela Estanislao Zeballos se necesitan cinco millones para ponerla en condiciones.
“Inspeccionaron 700 escuelas en dos meses”
Biaggiotti destacó que desde el Gobierno simplificaron “al máximo los procedimientos administrativos que suelen llevar tiempo”, y que les permitieron a las directoras presentar “un solo presupuesto” cuando habitualmente son “tres más un pliego técnico”.
A su vez, minimizó los problemas de infraestructura de las escuelas y se refirió a un cambio en la normativa que incluye las regulaciones bajo las que debe trabajar Litoral Gas.
“Litoral Gas, ante una denuncia o ante alguna irregularidad comprobada, hace la verificación. Cuando constata, por ejemplo, que un caño es una pulgada menor a la que corresponde, corta el suministro”, aseveró.
Esto, según explicó, se debe a que en 2019 cambiaron los requisitos para habilitar el servicio. Fue ese mismo año cuando se solicitó que se llevaran a cabo las inspecciones en “todos los establecimientos educativos”, cosa que no ocurrió en tiempo y forma.
“Lo que lamento es que no se hayan sentado con nosotros para organizar” y controlar de a “cinco o 10 escuelas por mes”, manifestó el delegado regional del Ministerio, y volvió a criticar el trabajo de la empresa: “Inspeccionaron 700 escuelas en dos meses, a poco tiempo del invierno”.
Biaggiotti sostuvo que no se trata de “problemas” serios que impiden habilitar el servicio, sino más bien de detalles o “irregularidades” como la ya mencionada sobre las pulgadas de los caños de gas, y remarcó que las instalaciones de calefactores, por ejemplo, en algunos casos pueden haberse hecho antes del 2019, por lo que no coinciden con los requisitos establecidos a partir de ese año.