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Un interminable bostezo: Newells y Arsenal se olvidaron de jugar y regalaron un partido para el olvido

Newells esperaba a Arsenal en su estadio confiado de volver a sumar de  a tres luego de lo que fue la buna victoria obtenida en Santa Fe frente a Unión. El partido fue literalmente un “bodrio” futbolístico, costo muchísimo encontrarle un sentido a tanta mediocridad expuesta por los protagonistas en el campo de juego. Un interminable bostezo sería la mejor síntesis para lo vivido en la tarde de martes en el Parque Independencia.   

El cotejo se jugaba lejos de los arcos, con traslado lento en la mitad de la cancha, el tedioso andar de los jugadores solo era sacado de contexto por algún arrebato individual. A los 22′ Panchito González se adelantó por izquierda,  mandó el centro que ni Reasco ni Garro pudieron conectar.

Nuevamente llegó el rojinegro a los 27′, todo muy forzado,  con una combinación entre Reasco y García que entraron tocando al área y el goleador no pudo rematar bien ante la marca del defensor visitante que lo molestó y lo obligó a fallar.

La penuria de los hinchas por el espectáculo que les tocó en suerte se alteró a los 34′ cuando un pase errado en la salida de Arsenal terminó en Reasco por izquierda que metió el centro para García que anticipó de cabeza en el primer palo  a los defensores rivales pero la mandó lejos del arco.

A los 44′ se produjo la incidencia quizás mas importante del pobre cotejo tras un pase de  Pablo Pérez que fueron a buscar García y Reasco donde el arquero Medina anticipó  ambos quedándose con la pelota y cayó ante la entrada del ecuatoriano que pareció tocarlo con su brazo por lo que Falcón Pérez le mostró la segunda amarilla y debió abandonar la cancha dejando a Newells con uno menos. La expulsión de Reasco complicó aún mas el transito de la lepra por el encuentro.

El segundo tiempo fue de pero calidad en el juego, Newells que con diez trataba en vano de superar sus propias limitaciones y Arsenal que no aprovechó nunca la ventaja numérica y se dedicó a cuidar el punto que se llevaba del Bielsa. Recién a los 30′ la lepra se aproximó con un centro pasado de Campagnaro que no alcanzaron a conectar sus compañeros, muy poco para intentar inquietar al débil rival que nunca se animó a hacer valer su superioridad numérica.

El trámite continuo en “modo” mediocre hasta que a los 38′ Lema robó una pelota y habilitó  a Garro que cayó dentro del área ante la marca de Goñi y el árbitro cobró posición adelantada del delantero local tras la revisión del VAR. Las repeticiones no entregaron ninguna claridad sobre la veracidad de la sanción del juez del partido.

El pitazo final solo sirvió para dar por finalizada una exposición paupérrima de fútbol. Newells y Arsenal no hicieron ningún merito para llevarse la victoria. El empate fue un resultado justo y para la lepra la cuenta pendiente sigue siendo encontrar al Director Técnico adecuado para reorganizar las ideas de un equipo que carece de estrategia y sobretodo de una necesaria identidad de juego. La lepra deambula por el torneo sumergido en una irregularidad que parece no tener fin.

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