Yoga para combatir el estrés y encontrar serenidad
El estrés y la ansiedad están en todas partes, pero si te están consumiendo, puedes agarrar la colchoneta y probar cómo te va con el yoga.
El yoga es una práctica del cuerpo y la mente que combina posturas físicas, respiración controlada y meditación o relajación. El yoga puede ayudar a disminuir el estrés, la presión arterial y la frecuencia cardíaca. Además, casi todas las personas pueden hacerlo.
El yoga
El yoga es una práctica que combina cuerpo y mente, se considera uno de los muchos tipos de enfoques complementarios e integradores de la salud y combina disciplinas físicas y mentales que pueden ayudar a alcanzar tranquilidad en el cuerpo y la mente. Todo esto puede ayudarte a relajar y a controlar tanto el estrés como la ansiedad.
El yoga tiene muchos estilos, formas e intensidades. El hatha yoga, en especial, puede ser una buena opción para controlar el estrés. El hatha es uno de los estilos de yoga más comunes y, posiblemente, a los principiantes les gusta su ritmo más lento y movimientos más sencillos. No obstante, la mayoría de las personas obtienen beneficios con cualquier estilo de yoga, así que todo es cuestión de preferencias personales.
Los componentes principales del hatha yoga y de las clases más generales de yoga son:
- Posturas. Las posturas o poses del yoga son una serie de movimientos destinados a incrementar la fuerza y la flexibilidad. Las posturas varían desde acostarse en el piso sintiéndose completamente relajado hasta poses más complicadas que exigen casi llegar al límite físico.
- Respiración. Controlar la respiración es una parte importante del yoga. El yoga enseña que el control de la respiración ayuda a tomar control del cuerpo y a tranquilizar la mente.
- Meditación o relajación. En el yoga, también se puede incorporar la meditación o la relajación. La meditación puede ayudar a tomar más consciencia y estar más atento al momento presente, sin hacer juicios.
Beneficios del yoga para la salud
Los posibles beneficios del yoga para la salud son:
- Reducción del estrés. Varios estudios han demostrado que el yoga ayuda a disminuir el estrés y la ansiedad, además de mejorar el estado de ánimo y la sensación general de bienestar.
- Mejor estado físico. Practicar yoga puede llevar a tener mejor equilibrio, flexibilidad, amplitud de movimiento y fuerza.
- Tratamiento de afecciones crónicas. El yoga ayuda a disminuir los factores de riesgo para enfermedades crónicas, como enfermedad cardíaca y presión arterial alta. Puede también ayudar a aliviar afecciones crónicas como depresión, dolor, ansiedad e insomnio.
Precauciones al practicar yoga
En la mayoría de las personas sanas, el yoga se considera una actividad segura, siempre y cuando se la practique bajo la supervisión de un instructor capacitado. No obstante, hay situaciones en las que el yoga podría ser peligroso.
Por lo tanto, consulta con el médico antes de empezar a practicar yoga si tienes alguna de las siguientes afecciones o te encuentras en alguna de estas situaciones:
- Hernia de disco
- Riesgo de coágulos sanguíneos
- Afecciones oculares, como glaucoma
- Embarazo: si bien el yoga es seguro para la mayoría de las mujeres embarazadas, hay que evitar ciertas posturas
- Problemas de equilibrio graves
- Osteoporosis grave
- Presión arterial no controlada
En estas situaciones, podrías practicar yoga si tomas algunas precauciones, como evitar ciertas posturas y estiramientos. Si tienes dudas o presentas síntomas, como dolor, consulta al médico para asegurarte de que el yoga te esté beneficiando y no perjudicando.
Para empezar
Aunque se puede aprender yoga a través de libros y videos, para los principiantes suele ser mejor aprender con un instructor. Además, las clases generan camaradería y amistades, que también son importantes para el bienestar general.
Cuando encuentres una clase que suene interesante, habla con el instructor para saber qué esperar. Algunas preguntas que puedes hacer son:
- ¿Qué cualificaciones tiene el instructor? ¿Dónde se capacitó y cuánto hace que se dedica a enseñar?
- ¿Tiene experiencia enseñando a alumnos en iguales condiciones que las tuyas o con los mismos problemas de salud que tú? Si tienes inflamada la rodilla o te duele el hombro, ¿puede el instructor ayudarte a encontrar posturas que no empeoren la situación?
- ¿Qué nivel de exigencia tiene la clase? ¿Es adecuada para principiantes? Si es tu primera vez, ¿será lo suficientemente fácil de seguir?
- ¿Qué puedes esperar de la clase? ¿Servirá para lo que tú necesitas, como controlar el estrés y relajarte, o está orientada hacia personas que buscan otros beneficios?
Alcanzar el equilibrio adecuado
Todas las personas tienen cuerpos y habilidades diferentes. Según tu habilidad personal, a lo mejor tengas que modificar las posturas de yoga, o el instructor te sugiera que modifiques algunas posturas. A fin de que practiques yoga de forma segura y buena para ti, escoge un instructor con experiencia y que comprenda tus necesidades.
Independientemente del tipo de yoga que practiques, no necesariamente tienes que hacer todas las posturas. Si una postura te resulta incómoda o no puedes mantenerla el tiempo que el instructor dice, simplemente no la hagas. Los buenos instructores te comprenderán y te animarán a intentar, pero no sobrepasar, tus límites personales.