Tailandia y Camboya acordaron el alto el fuego
Los líderes de Tailandia y Camboya acordaron implementar un alto al fuego a partir de la medianoche del lunes, declaró el primer ministro malasio, Anwar Ibrahim, tras una reunión especial celebrada aquí.
La reunión sobre el alto al fuego entre el primer ministro camboyano, Hun Manet, y el primer ministro interino tailandés, Phumtham Wechayachai, fue organizada por Anwar el lunes por la tarde en su de Putrajaya.
El embajador de China en Malasia, Ouyang Yujing, asistió a la reunión y pronunció un discurso, informó la agencia de noticias Xinhua. En una conferencia de prensa conjunta tras las conversaciones sobre el alto al fuego, Anwar describió un proceso de desescalada gradual y el mecanismo mediante el cual se implementará y supervisará.
“Camboya y Tailandia llegaron a un entendimiento común: un alto al fuego inmediato e incondicional con efecto a partir de las 24:00 (hora local) del 28 de julio de 2025. Este es un primer paso vital hacia la desescalada y el restablecimiento de la paz y la seguridad”, declaró.
Según Anwar, el alto el fuego inicial será seguido por el restablecimiento de contactos entre los comandantes regionales de los ejércitos de ambas partes mediante una reunión presencial a las 7:00 hora local del 29 de julio.
A continuación, se reunirán los agregados de defensa de ambas partes, presididos por el presidente de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN), si ambas partes están de acuerdo.
Finalmente, Camboya acogerá una reunión del Comité General de Fronteras (GBC) el 4 de agosto.
Como presidente actual de la ASEAN, Malasia está dispuesta a coordinar un equipo de observadores para verificar y garantizar la implementación del alto el fuego.
Malasia también consultará con otros estados miembros de la ASEAN para que participen en la labor de observación, lo que refleja el compromiso regional de apoyar la paz sobre el terreno”, declaró.
“Ambas partes también acuerdan reanudar la comunicación directa entre los primeros ministros, ministros de Asuntos Exteriores y ministros de Defensa”, añadió Anwar.
Hun Manet afirmó que el éxito de las conversaciones brindará numerosas oportunidades para que cientos de miles de personas de ambos lados recuperen la normalidad y marcará el inicio de los esfuerzos para reconstruir la confianza y la cooperación entre Camboya y Tailandia.
Por su parte, Phumtham afirmó que el resultado alcanzado refleja el deseo de Tailandia de lograr una solución pacífica, a la vez que continúa protegiendo la soberanía del país y la vida del pueblo tailandés.
“Acordamos un alto el fuego que ambas partes cumplirán con éxito y de buena fe”, añadió.
Según el comunicado de prensa conjunto posterior a esta reunión especial, los ministros de Asuntos Exteriores y de Defensa de Malasia, Camboya y Tailandia recibieron instrucciones para desarrollar un mecanismo detallado para la implementación, verificación y presentación de informes del alto el fuego. Este mecanismo servirá de base para una paz duradera y la rendición de cuentas.
Desde que estallaron el jueves los enfrentamientos armados entre soldados camboyanos y tailandeses por las zonas fronterizas en disputa, más de 30 personas murieron en ambos bandos y más de 100.000 fueron evacuadas a zonas seguras, según cifras proporcionadas por ambos países.
Ambas partes se acusaron mutuamente de violar el derecho internacional y de abrir fuego primero.
Como presidente de la ASEAN para 2025, Malasia presionó activamente en los últimos días para que Tailandia y Camboya regresen a la mesa de negociaciones, con la esperanza de reducir las tensiones mediante el diálogo y aprovechar al máximo el papel de la ASEAN en la paz y la estabilidad regionales.
Declaraciones
“Quisiera agradecer al primer ministro (malasio), Anwar Ibrahim, su iniciativa y coordinación para organizar y acoger esta reunión especial”, afirmó el primer ministro de Camboya, Hun Manet.
Por Tailandia estuvo al frente de las negociaciones el primer ministro interino, Phumtham Wechayachai, de acuerdo con informaciones de la agencia de noticias Xinhua.
En un comunicado, el portavoz del Gobierno tailandés, Jirayu Houngsub, precisó que Phumtham viajó a Malasia el lunes por invitación de Ibrahim.
Malasia ostenta actualmente la presidencia rotatoria de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN).
Historias de evacuados
Rik Channa, una ciudadana de 35 años evacuada del conflicto fronterizo entre Camboya y Tailandia, se emocionó este el lunes al enterarse de que los líderes de ambos países habían llegado a un acuerdo de alto el fuego.
Sentada bajo una tienda de campaña improvisada en un refugio seguro en el distrito de Chong Kal, a más de 100 kilómetros de la frontera entre Camboya y Tailandia, esta madre de tres hijos relató que su familia y otros aldeanos habían huido de sus hogares cerca de la frontera desde el 25 de julio, escapando de los proyectiles de artillería disparados por soldados tailandeses.
“Estoy muy contenta de recibir la información sobre el alto el fuego. Tengo muchas ganas de volver a casa porque hay perros, gatos y vacas, y nadie los cuida”, declaró a la agencia de noticias Xinhua.
Channa comentó que en la zona segura era difícil vivir debido a la escasez de alimentos, agua potable e instalaciones sanitarias.
“Huí hasta aquí, trayendo solo algo de ropa, un poco de arroz y una bicicleta. No pude llevar muchas pertenencias porque los proyectiles de artillería cayeron muy cerca de mi casa, así que me apresuré a escapar, preocupada por si me alcanzaban”, explicó y continuó: “He visto a gente escapar de los proyectiles de artillería. Algunos resultaron heridos y otros ilesos”.
Yong Yim, un evacuado camboyano de 45 años, expresó que también estaba encantado de saber del alto el fuego. “No quiero ver la guerra, espero ver paz para todos”, declaró a Xinhua este padre de cuatro hijos y contó que su familia huyó a este refugio, trayendo consigo algo de ropa, un remorque y algo de arroz.
“Lo vi con mis propios ojos: ambos bandos se dispararon proyectiles de artillería, destruyendo algunos edificios; por eso huimos aquí”, declaró.
La portavoz del Ministerio de Defensa de Camboya, la teniente general Maly Socheata, declaró que, hasta la fecha, un total de 39.828 familias camboyanas, compuestas por 134.707 integrantes, entre ellos niños, mujeres embarazadas, ancianos y personas con discapacidad, huyeron a zonas seguras o a los hogares de sus familiares.