Para la diputada Bruera, “desde el 2017 hay un retroceso en el proceso penal a fiscales y defensores”
La Cámara de Diputados de la provincia fue escenario este martes de una nueva discusión en torno a un debate no concluido en Santa Fe respecto a quienes y como se controla y sanciona las irregularidades de fiscales y defensores.
En el recinto de la Cámara Baja, los asistentes a la audiencia discutieron sobre el control y auditoría del Ministerio Público de la Acusación y el régimen disciplinario sobre los órganos fiscales del Ministerio Público de la Acusación y del Servicio Público Provincial de Defensa Penal.
Son tres los diputados que presentaron iniciativas de reforma al sistema implementado en 2014, todos poniendo como centro de debate la polémica reforma a la ley 13.807, que adjudicó a la Legislatura el “control político” de los fiscales y defensores, mediante el poder sancionatorio de las faltas graves.
Los autores de estas iniciativas son la justicialista Matilde Bruera, el radical Fabián Palo Oliver y la socialista Lionella Cattalini, aunque también una propuesta llegó desde la cabeza del MPA, el Fiscal Regional Jorge Baclini.
En el caso del proyecto de la diputada Bruera, propone la derogación lisa y llana de la norma. La iniciativa propicia reformas tendientes a volver al sistema anterior para dejar en manos de la Auditoría General de Gestión el régimen de fiscales y mantener en la órbita legislativa el de las autoridades del MPA.
“Esto es una discusión de varios años. Desde el 2017 que se produce un retroceso en la materia. En la provincia de Santa Fe se reformó el proceso penal para restablecer los principios básicos de la imparcialidad judicial, independencia y autonomía de los ministerios públicos”, señaló la legisladora Bruera,
Además, se refirió a la posibilidad de complementar los proyectos con los de sus pares: “La compatabilización debe definirse en el sistema disciplinario. Propongo volver al anterior sistema del tribunal de disciplina para el control de los fiscales, fiscales adjuntos y defensores”.
A su vez, mencionó: “La Legislatura puede participar del control de esos órganos, pero no puede tener la hegemonía. Sería la introducción del poder legislativo en el judicial y someter a los fiscales”.
Y afirmó: “Cuando la Legislatura le puso un pie en la cabeza a los fiscales, se generó un escándalo de corrupción. Y ha impedido en la investigación por presuntas irregularidades que no se han podido investigar por la invocación de fueros”.
Por último, expresó: “El retroceso del control de los fiscales inició con la investigación de algunos senadores. El fiscal tiene que ser independiente. Sino se le impide avanzar sobre cualquier legislador por temor y sometimiento político”.