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Robos y balaceras otra vez forman parte del “menu principal” de la inseguridad rosarina

Rosario vive un momento álgido de recrudecimeinto de violencia, con robos y balaceras, en las últimas horas se sumaron más casos de inseguridad en Rosario. En uno de los hechos el frente de una casa ubicada en barrio Godoy fue atacado a tiros en la noche de este jueves. Ocurrió en Uriarte al 7900, cuadra en la que un joven de 25 años fue baleado el pasado domingo.

La balacera de este jueves tuvo lugar después de las 23, cuando una moto con dos ocupantes abrió fuego contra la fachada de un domicilio, donde la Policía constató tres impactos de arma de fuego. Uno de los disparos dio contra un Renault 12 que estaba estacionado.

Los peritos forenses que trabajaron en la escena incautaron cuatro vainas servidas calibre 9 milímetros y un plomo, que serán enviados a analizar por pedido de la unidad fiscal de Flagrancia del Ministerio Público de la Acusación.

La propiedad lindera a la atacada también fue baleada, pero el domingo pasado, cuando desde una moto abrieron fuego e hirieron a un joven que terminó internado en el hospital de emergencias Clemente Álvarez con un impacto en el costado izquierdo de la cadera. Días después fue dado de alta.

Mientras que el intento de robo se dio cuando una joven de 21 años debió ser asistida también en la noche de este jueves en el hospital Roque Sáenz Peña luego de haber sufrido una herida de arma de fuego en la mano izquierda. Según relató, fue al resistirse a un robo en Amenábar entre Mitre y Sarmiento. 

De acuerdo al relato de la víctima, cerca de la medianoche, un ladrón la atacó mientras caminaba y se llevó su cartera y su celular. En medio del forcejeo, le disparó. El proyectil ingresó y salió de la mano, según el diagnóstico brindado en el hospital.  El hecho ocurrió a dos cuadras del destacamento móvil 2 de Gendarmería Nacional y del Centro de Justicia Penal. 

La “supuesta” tranquilidad que se había logrado en el último año se terminó drásticamente en este mes de enero del 2025, con 20 muertes y muchisimos casos de ataques sicarios que volvieron a poner en escena el temor por al vida que se ha hecho creciente entre los rosarinos de que la situación de violencia existente puede aún empeorar mas en un futuro inmediato en la ciudad.

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