Realizaron un importante estudio sobre mortalidad por bacterias resistentes a medicamentos
La mitad de los pacientes que adquirieron infecciones por una bacteria resistente a antimicrobianos (Klebsiella) falleció durante su internación, concluyó un estudio realizado en Argentina con pacientes de centros públicos y privados de diferentes localidades, lo que constituye uno de los trabajos más grandes realizados hasta el momento en la región y aporta datos sobre esta problemática que afecta a la salud mundial.
Se trata del Estudio Muticéntrico de Bacteriemias por bacilos gram-negativos Resistentes a Carbapenemes en Argentina (EMBARCAR) que analizó la historia clínica de 466 pacientes de centros públicos y privados de la Ciudad de Buenos Aires y el conurbano bonaerense, además de localidades de las provincias de Buenos Aires, Santa Fe, Misiones, Mendoza y San Juan.
“La idea era evaluar la evolución de los pacientes con infecciones en la sangre por bacilos gram negativos resistentes a carbapenemes, que es un antibiótico de amplio espectro. Lo que se buscaba era ver su evolución clínica, la mortalidad y qué cosas influyeron en esa mortalidad”, señaló a Télam la infectóloga Analia Mykietuk, una de las autoras del trabajo.
En tanto que el infectólogo Pablo Scapellato, otro de los investigadores, explicó que “al ser un estudio sobre ‘bacteriemias’, que son “infecciones de la sangre” indefectiblemente se trató de personas internadas y con una situación de salud delicada; de hecho más del 70 por ciento estaba en terapia intensiva y casi el 70 por ciento estaba con respirador”.
Mykietuk explicó que “de todos los pacientes que se incluyeron en el estudio se analizó una bacteria en particular: la Klebsiella pneumoniae resistente a carbapenemes”, que representaban el 53 por ciento de los aislamientos, es decir 249 casos.
“En estos pacientes con Klebsiella lo que encontramos fue que el 50% murió durante su internación; y del total (es decir de los 466), el 60 por ciento tenía un tratamiento empírico que era inadecuado porque no cubría la resistencia a carbapenem”, detalló la infectóloga.
Otra observación de la investigación fue que aquellos pacientes que habían recibido un antibiótico de última generación (ceftazidima avibactam) tuvieron una mejor evolución que los otros; aunque éste no fue el principal objetivo del trabajo.
La resistencia a los antimicrobianos (RAM) es una de las problemáticas sanitarias más urgentes a nivel mundial y se produce cuando bacterias, virus, hongos y parásitos cambian a lo largo del tiempo y dejan de responder a los medicamentos, lo que dificulta el tratamiento de infecciones y aumenta el riesgo de propagación de enfermedades, enfermedades graves y muerte.
Se estima que para el año 2050 puede convertirse en la primera causa de muerte a nivel mundial si no se genera una respuesta mundial conjunta y sistematizada.
Las infecciones bacterianas resistentes por sí solas están asociadas con casi 4,95 millones de muertes por año, con 1,27 millones de muertes atribuidas directamente a la RAM.
El estudio, financiado por la Sociedad Argentina de Infectología (SADI), es -según los investigadores- “uno de los más grandes que se han hecho sobre este tema y aporta datos locales, de los que hasta ahora, carecíamos”.
“Además, nos proporciona información precisa respecto a la forma en que debemos tratar estas infecciones y nos muestra, de modo muy potente, la gravedad del problema de la resistencia a los antimicrobianos, urgiéndonos a trabajar para mejorar el control de las infecciones dentro de los hospitales y usar los antibióticos más prudentemente”, concluyó Scapellato.
En agosto pasado, se aprobó en Argentina la Ley 27.680 de Prevención y Control de la Resistencia Antimicrobiana, que tiene como uno de los objetivos fundamentales el uso responsable de los antibióticos, tanto en salud humana como animal y la regulación en el expendio.