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¿Quo vadis, voto?: El electorado va a las urnas en unas PASO inmersas en un clima de bronca, de falta de propuestas y con una sociedad aún rehén de la grieta

“El hombre debe elegir, no aceptar su destino” – Paulo Coelho

Este domingo, Argentina, “un país con buena gente” va a las urnas para definir en estas Primarias Abiertas Simultaneas Obligatorias quienes serán los representantes de los principales espacios que dirimen candidaturas en las respectivas internas partidarias, para después poder encaminarse, con el panorama mas despejado, hacia las generales del 22 de octubre, donde se empezará a definir quién será el próximo presidente que gobernará los destinos de la patria por cuatro años con el compromiso innegociable de sacar al país de esta dura crisis económica-social que tiene en vilo a la sociedad toda.

Si algo le faltaba al recurrente escenario de desencanto popular de los últimos tiempos, son los hechos de violencia que atravesaron con tragedia y dolor a la comunidad argentina esta semana. La muerte absurda de Morena, la niña de 11 años en Lanús, el fallecimiento de Facundo Molares en una manifestación en el Obelisco y el asesinato del médico en ocasión de robo en Morón, no hicieron más que exacerbar la bronca que tiene la ciudadanía contra la clase dirigencial, que solo se dedicaron a tirarse la responsabilidad de las muertes de un lado hacia el otro del mostrador de la grieta, mostrando una vez más la insensibilidad inconducente acostumbrada.

El ministro de Economía, Sergio Massa es el precandidato a Presidente con mayor intención de voto en la previa de las PASO.

Sergio Massa, el ministro de Economía en funciones y precandidato presidencial, pinta como para ser el candidato más votado en estas primarias, presunciones que están amparadas por diversos sondeos de opinión que lo colocan en ese rol de ganador individual, aunque se deben atender las salvedades del caso, debido a la mala prensa que hoy ostentan las encuestadoras a raíz de los “yerros” que han cometido al momento de pronosticar resultados electorales. El ex intendente de Tigre parece tener el camino más tranquilo dentro de las principales internas, contando para ello con el apoyo de casi todo el oficialismo, la CGT en pleno y hasta, sectores del Círculo Rojo que abrevan a su candidatura. Todo parece indicar que dará cuenta de su oponente, Juan Grabois por un amplio margen, aunque en tiempos tan volátiles en cuanto a empatías y sentimientos, nada es seguro.

La interna entre Horacio Rodríguez Larreta y Patricia Bullrich es, por lejos, la más atractiva y por esa razón, la incertidumbre rodea “con altas dosis de misterio” al resultado final de la disputa entre ambos. Los fuertes enfrentamientos discursivos entre los candidatos, mantuvieron preocupados a los estrategas de la fuerza, sobretodo cuando las diferencias escalaron en la única búsqueda de desmerecer cualquier virtud y potenciar hasta el hartazgo las falencias del oponente. Un peligroso juego del “todo vale” que generó su propia grieta dentro de Juntos por el Cambio, con posiciones que se volvieron tan antagónicas como irreconciliables.

Patricia Bullrich y Horacio Larreta conforman la interna más atractiva de estas PASO dentro de la Alianza Juntos por el Cambio.

La gran mayoría de estudios de opinión muestran a la presidenta del PRO, en uso de licencia, como la triunfadora de la interna, aunque nadie en su sano juicio puede confirmar que ese será resultado final al momento del recuento de los sufragios. El “todo o nada” que propone Bullrich se contrapone con una actitud más moderada y conciliadora de Larreta, que guiándose por el triunfo obtenido por Pullaro en las provinciales de Santa Fe apuesta a repetir ese logro en estas PASO presidenciales. Halcones vs Palomas, la historia se repite, aunque no hay certeza alguna sobre quién se llevará la victoria esta vez.  

Javier Milei, mientras tanto, en su dulce espera, anda pescando en el rio revuelto del electorado, con su particular estilo disruptivo, el economista sabe que todo acto que interpele a la política tradicional se convierte en agua para su molino. Los lamentables hechos de violencia y muerte que signaron a la Argentina en estos días, provocarán que ese estado latente de enojo social contra la política se pueda transformar en apoyo a la figura del líder de La Libertad Avanza. “La política en este país es como el rating, es momento a momento, esta vez los tristes hechos de esta semana quizás nos jueguen a favor, así de loca esta la cosa”, señalaba a este medio un dirigente libertario de la ciudad de Rosario.

Javier Milei puede dar la sorpresa en estas PASO en un escenario de mucho enojo del electorado con la clase política.

En Santa Fe se puede dar un particular escenario electoral de cuatro porciones, porque a Unión por la Patria, Juntos por el Cambio y la Libertad Avanza hay que sumarle Hacemos por Nuestra Patria, el espacio de Juan Schiaretti que tiene al Socialismo como acompañante de ruta para esta aventura. “Tenemos grandes expectativas para la elección del domingo, no solo por el acuerdo con el Socialismo que nos aportará el apoyo de su electorado a la causa, sino, porque muchos peronistas que no quieren al kirchnerismo y que no fueron contenidos por el gobernador, avisan que votarán a Juan al considerarlo como un buen representante del verdadero peronismo federal”, expresó con entusiasmo el Ministro de Desarrollo Social de Córdoba, José Massei al ser consultado por este portal sobre los comicios de este domingo.

“Hagan sus apuestas” advierte el crupier y los espacios se preparan para competir en unas PASO que serán muy particulares, decoradas por el desasosiego social y por una esperanza que se encuentra hipotecada por continuas malas praxis electorales. Este domingo la democracia argentina pone a prueba al compromiso ciudadano, cuya palpable apatía genera un temor en ciernes sobre la clase política, de que el votante les dé nuevamente la espalda a las elecciones y provoque ese vacío que ponga en riesgo a las expectativas de éxito que acunan para sí, todos los candidatos. “El que no vota no tiene derecho a quejarse”, supo decir alguna vez Louis L’Amour, quizás este sea un buen momento, para hacerle caso nomás.

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