Las maniobras militares ruso-chinas responden a la agresividad de EEUU en Asia, según Moscú
Las maniobras conjuntas de las marinas rusa y china en el Mar de China Oriental son una “reacción” a la posición “agresiva” de Estados Unidos en Asia, aseguró hoy el máximo jefe militar ruso, en plena tensión entre Moscú y Washington por la guerra en Ucrania.
“Esta cooperación es una reacción natural a la acumulación agresiva del potencial militar estadounidense en la región”, afirmó el jefe del Estado Mayor ruso, general Valeri Guerasimov, en Moscú ante representantes militares de países extranjeros.
“Las patrullas marítimas y aéreas ruso-chinas en la región Asia-Pacífico, así como los ejercicios y entrenamientos, se convirtieron en una aplicación en práctica de la asociación estratégica con China”, señaló Guerasimov durante su intervención.
Rusia anunció el lunes que varios de sus buques de guerra participarán en unas maniobras con la marina china entre el 21 y el 27 de diciembre en el mar de China Oriental.
Las maniobras incluirán ejercicios conjuntos de lanzamiento de misiles y de artillería, entre otros, en un momento en el que Moscú y Beijing refuerzan sus vínculos frente a Occidente, en plena guerra en Ucrania.
“El objetivo de estos ejercicios es aumentar la coherencia en el combate de las tropas y fuerzas de ambos países y su capacidad de resistir a los nuevos desafíos y amenazas”, puntualizó Guerasimov.
El general aclaró que ninguno de los dos países tiene la intención de “crear alianzas” o “nuevas divisiones en la región, como Washington”, informó la agencia de noticias AFP.
En los últimos meses, Rusia ha tratado de fortalecer sus vínculos con los países asiáticos, sobre todo con China, como respuesta a las sanciones occidentales impuestas a Rusia tras su ofensiva contra Ucrania.
Moscú y Beijing se presentan como contrapeso geopolítico frente a Estados Unidos y sus aliados.
China no condenó la invasión militar de Rusia en Ucrania pero, pese a la amistad “sin límites” que afirma tener con Moscú, se negó a apoyar a Rusia con armas.
La región de Asia-Pacífico es una zona estratégica tanto para Estados Unidos como para China y Rusia.
Estados Unidos realiza un equilibrio entre sus esfuerzos en Ucrania, donde busca responder a las acciones de Rusia, y su estrategia en Asia para disuadir a China especialmente de cualquier avance en Taiwán.
Washington y Beijing arrastran una larga historia de tensiones, especialmente debido a la balanza comercial e históricas disputas geopolíticas, además del contraste ideológico y político.
Este año, la visita de la presidenta de la Cámara de Representantes estadounidense, Nancy Pelosi, a la isla de Taiwán, cuya soberanía reclama China, tensó aún más los vínculos entre ambas potencias.
China considera que Taiwán es una parte de su territorio y busca retomar el control, por la fuerza si fuera necesario.
Tras la visita de Pelosi, Beijing realizó maniobras militares a gran escala alrededor de la isla.
Beijing arremete contra las acciones diplomáticas que puedan otorgar legitimidad a Taiwán y ha respondido con creciente indignación a las visitas a la isla por parte de altos cargos occidentales.
Washington, por su parte, sostiene que la política estadounidense hacia Taiwán no ha cambiado y que se sigue oponiendo a cualquier cambio unilateral en el status quo de la isla.
Fuente: Télam