La recaudación recibe el impacto de la recesión y obliga a un mayor ajuste
La recaudación impositiva de abril fue de $ 8.663.813 millones, con una variación interanual de 239,6%, lo que implica una caída en términos reales comparado contra abril de 2023 de un 13%.
La recesión y la caída en la actividad golpea a los ingresos públicos con merma en la recaudación de los impuestos asociados al consumo y la actividad, como lo son Ganancias e IVA, que además son coparticipables. Por lo cual, la caída de transferencias a las provincias también viene siendo muy fuerte y por ahí también pasa la discusión con las provincias. Pierden con la caída de la actividad y no reciben las mejoras de los impuestos al comercio exterior que son los únicos que crecen.
De hecho, según cálculos de IARAF, al excluir la recaudación por tributos vinculados al comercio exterior, donde sobresale los derechos de exportación impactados por la devaluación de diciembre, la caída sería del 19%.
La noticia no es para nada buena para el Gobierno, ya que un menor nivel de ingresos, exige un mayor ajuste en el gasto, lo que podría implicar un círculo negativo en el proceso. Menor recaudación, mas ajuste. peor caída de consumo y actividad, menor recaudación y así a una economía cada vez más fría.
Según la consultora LCG, “poco más de la mitad de la caída anual de la recaudación se explica por la menor recaudación del impuesto a las ganancias afectada principalmente por las modificaciones que impusieron el impuesto cedular para empleados en relación de dependencia y jubilados, algo que de salir la Ley Bases, se restituiría.
Por el lado del otro impuesto que sostiene la recaudación, el IVA, siguió cayendo a tasas de dos dígitos (-11% a/a real). En total, IVA DGI explicó 22% de la baja general.
Otro impuesto totalmente asociado a la actividad, el de Créditos y Débitos también reflejó una contracción del 15% anual real.
Será mas que importante de cara a recuperar ingresos y frenar la caída de la recaudación en los próximos meses, la restitución del impuesto a las ganancias a los trabajadores ahora rebautizado como impuesto a los ingresos personales y los ingresos de los derechos de exportación de la mano de la cosecha gruesa que el campo debería empezar a liquidar fuerte en el mes de mayo.
Al respecto, los impuestos que vienen apuntalando la recaudación son los asociados al comercio exterior. El Impuesto País (+212% a/a real) y los Derechos de Exportación (+63% a/a real) siguen actuando de sostén debido a la corrección cambiaria, mejor cosecha (aun con precios más bajos) y una base imponible y alícuota mayor para el impuesto PAIS que también se ve beneficiado por la colocación del bono BOPREAL que generó una recaudación extra en el impuesto PAIS.
Además. de la mano de la actualización del impuesto a los combustibles (que para mayo ya volvió a suspender el Gobierno) por primera vez luego de 27 meses (diciembre de 2021), tuvo una variación mensual interanual real positiva que colaboró al número final.
Desde LCG, estiman que en el número final del año la recaudación tributaria caerá un 19% real anual promedio (21% PBI).