La presidenta de Cannes lamentó la crisis que vive el cine argentino
“América latina es un continente al que, como festival, deberíamos llegar aún más”, consideró la presidenta del Festival de Cannes, la alemana Iris Knobloch. En conversación con varios medios internacionales, Knobloch argumentó que, aunque la selección de películas para el certamen debe mantenerse “ciega a las nacionalidades”, el festival tiene una vocación muy internacional y la región latinoamericana es un espacio donde hay margen para tener más intercambio.
Puso como ejemplo la iniciativa desarrollada junto al Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (Incaa) de Argentina para celebrar en Buenos Aires, en noviembre del año pasado, una Semana de Cine del Festival de Cannes 2023, en paralelo a la edición número 15 del mercado audiovisual Ventana Sur.
“Nadie sabe lo que pasará con eso”, apuntó con pesimismo respecto a la continuidad del proyecto argentino, debido a los recortes de financiación al cine aplicados por el gobierno de Javier Milei.
La Argentina estará representada este año fuera de competencia en Cannes con la comedia de Daniel Burman ‘Transmitzvah’, pero a nivel de los largometrajes la selección oficial sólo cuenta con otra obra latinoamericana, la película ‘Motel Destino’, con la que el brasileño Karim Aïnouz competirá por la Palma de Oro por segundo año consecutivo.
Al margen de eso, México también estará presente con ‘Emilia Pérez’, aunque la película tenga pasaporte francés, ya que el galo Jacques Audiard se ha embarcado en un musical sobre los cárteles de ese país junto a estrellas como Selena Gomez, Zoe Saldaña y Karla Sofía Gascón.
Asia también es otro territorio donde Knobloch ve margen para expandir la influencia del festival, aprovechando “la “oportunidad de tender puentes que supone el cine, ya que lo bonito de las películas es que no tienen fronteras”, remarcó.
De hecho, Knobloch apuntó que, si como presidenta del festival de cine más grande del mundo hubiera algo que pudiera cambiar idealmente, sería que el certamen en Cannes pudiera dar cabida a más personas aún para ver las películas y que, además, el festival continuara vivo durante el resto del año con eventos a través del globo.
APERTURA
La 77° edición del Festival de Cannes se inició anoche con la entrega de la Palma de Honor a Meryl Streep y el estreno de la comedia francesa ‘Le Deuxième Acte’. El gran evento finalizará el 25 de mayo con la entrega de la Palma de Oro, por la que este año compiten nombres como Francis Ford Coppola, Paolo Sorrentino y Yorgos Lanthimos.
Radiante, sonriendo y espectacular: así desfiló Meryl Streep por la alfombra roja de Cannes antes de la ceremonia de inauguración. La actriz incluso bailó un poco a los sones del tema ‘Mamma Mia’, de ABBA, que la recibió, y todo el mundo se rindió a su encanto, con un elegante vestido blanco cruzado que contrastaba con sus gafas de montura negra.
También bailaron sobre la alfombra roja Greta Gerwig, presidenta del jurado de la competencia oficial, y Lily Gladstone, que la acompaña en esas tareas. En su caso al ritmo de ‘September’, de Earth Wind & Fire.
Junto a ellas, el resto de los miembros del jurado, entre los que están la actriz Eva Green, el actor Omar Sy y el realizador español Juan Antonio Bayona.
También pasó por la primera alfombra roja de esta edición de Cannes el equipo de la película inaugural, ‘Le Deuxième Acte’, de Quentin Dupieux, que participa fuera de competencia. Antes habían llegado Juliette Binoche, de rojo, y Jane Fonda, una de las más aclamadas y de las más elegantes, con un vestido negro con bordados, así como el realizador Costa-Gavras.
Emanuelle Béart, presidenta del jurado de la Cámara de Oro, que reconoce a la Mejor ópera prima, posó con gafas de sol, un vestido de terciopelo negro y unos espectaculares pendientes de diamantes y esmeraldas.