Formosa: fuerte impacto de la desregulación económica y la recesión en el empleo privado
En un contexto nacional de recesión económica, la provincia de Formosa enfrenta una crisis laboral sin precedentes, marcada por una drástica caída en el empleo privado y una paralización en áreas clave de su economía.
De acuerdo con el Informe de Situación y Evolución del Trabajo Registrado (Sipa) publicado en julio de 2024 por la Secretaría de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, el nivel de empleo asalariado en el sector privado en Formosa experimentó un descenso alarmante.
En abril de 2024 el número de trabajadores registrados se redujo en un 0,6% respecto al mes anterior y un 17% en comparación interanual. Este patrón de declive persistió desde diciembre de 2023, cuando comenzó la administración libertaria.
El sector de la construcción en Formosa fue particularmente uno de los más golpeados. Este suceso se explica, en primer lugar, a partir del desplome de la inversión real directa en la provincia, que cayó un 96,7% en términos reales respecto del año pasado, según la consultora Politikon Chaco.
En este marco, el Observatorio de Políticas Públicas de Formosa Politiké señaló que en julio, la provincia gobernada por Gildo Insfrán había recibido sólo el 4,9% de la inversión presupuestaria, una cifra muy por debajo de la media nacional.
Por otra parte, el informe del Instituto de Estadística y Registro de la Industria de la Construcción (Ieric) muestra que Formosa sufrió una reducción del 65,5% en el número de trabajadores del sector en comparación con el año pasado.
Además, frente a la baja en el valor de los salarios, el comercio también entró en conflicto. Según el último reporte de la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico Sociedad Anónima (Cammesa), con datos de junio de 2024, el consumo de energía en la provincia disminuyó un 39,3% intermensual y un 41,8% interanual en este sector.
Finalmente, de acuerdo con un estudio de Cifra CTA, los sueldos valen un 32,1% menos desde noviembre de 2023 en materia nacional. Este retroceso en el poder adquisitivo contribuye a una situación aún más grave para los habitantes formoseños, que a su vez hacen frente a otros problemas por la falta de inversiones, la recesión nacional y el estancamiento económico.