Envían a juicio a una mujer que pretendió traficar cocaína impregnada en pantalones, musculosas y jeans
Una mujer de 31 años será juzgada por un tribunal oral federal, acusada de haber intentado traficar en agosto pasado cocaína impregnada en remeras, musculosas, jeans, pantalones y hasta toallones que llevaba dentro de una valija cuando pretendía abordar un avión en el Aeropuerto Internacional de Ezeiza con destino a la ciudad de Lisboa, en Portugal.
Fuentes judiciales informaron que se trata de Diana Micaela Rojas (31), quien permanece alojada en un penal federal y fue acusada por el fiscal en lo Penal Económico Emilio Guerberoff de los delitos de intento de contrabando de 3,112 kilos de cocaína para elaborar más de 28.300 dosis, por lo que podría recibir en el futuro juicio oral penas de entre 3 y 12 años de prisión.
En una resolución firmada días atrás, a la que tuvo acceso Télam, el juez en lo Penal Económico 6 Marcos Aguinsky hizo lugar al pedido del fiscal y elevó el expediente para que se sortee el tribunal que será el encargado de llevar adelante el juicio oral.
“Se deja constancia que ni la defensa ni la imputada hicieron uso de la opción” de apelar la requisitoria de elevación a juicio, señala la breve resolución judicial, por lo que el juez elevó la causa.
Rojas, quien tiene antecedentes penales por robo agravado por el uso de armas y purgó una condena de siete años de prisión, vivía al momento de su detención en la villa 1-11-14, aunque los investigadores no la vincularon con ninguna banda narco de esa zona.
En el pedido de elevación a juicio, el fiscal Guerberoff reseñó que el hecho fue descubierto el 25 de agosto de 2022 durante un procedimiento selectivo realizado por personal de la Sección Unidad de Apoyo Operativo Metropolitano de la División Investigaciones Narcotráfico Metropolitana del Departamento Narcotráfico y Delitos Conexos, de la Dirección General de Aduanas.
En esa oportunidad, los agentes aduaneros se dirigieron a la salida de pasajeros y equipajes en los mostradores de la empresa Air France, situados en la Terminal “A” del Aeropuerto Internacional “Ministro Pistarini”, en Ezeiza, y requirieron la presencia de Rojas, quien estaba a punto de abordar el vuelo AF 4085 de la empresa Air France, con destino final Lisboa, con escala en París.
La investigación
Los expertos aduaneros, que dependen de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), realizaron tareas de “perfilamiento” y “entrevistas” aleatorias entre los pasajeros y eso “puso bajo sospecha a Rojas, quien se mostró nerviosa”.
“Entró en estado de shock, a los gritos. Su estado era de tal nerviosismo que tuvo que ser asistida”, aseguró uno de los investigadores que participó de la pesquisa.
Al revisar su valija semirígida color negro, los agentes aduaneros hallaron una musculosa “que presentaba diferentes anomalías tanto en su peso y textura”, señala el requerimiento de elevación a juicio.
Ante esa situación, según el fiscal, “se realizó reactivo específico de cocaína a todas las prendas, resultando un total de 36 de ellas impregnadas”.
Se trata de musculosas, pantalones, remeras, jeans, toallones y poleras, las cuales llevaban impregnada la cocaína mediante un tratamiento en el que, luego, se logra recuperar la droga para su comercialización.
“En lo que respecta al grado de intervención que le cupo en la comisión del suceso, estimo que el comportamiento llevado a cabo por la imputada encuentra adecuación en el supuesto de la autoría, pues Rojas realizó de manera personal la totalidad de eventos relacionados con la relación de hecho cuya comisión se le atribuye, de modo que puede concluirse que ostentó el dominio del devenir causal del suceso”, indicó Guerberoff.
Luego, insistió en que “en lo que hace al aspecto subjetivo, cabe concluir que la imputada obró en pleno conocimiento de los elementos objetivos requeridos y con voluntad de producir el resultado disvalioso”.
“En efecto, para llegar a esta conclusión basta recordar las connotaciones del método de ocultamiento utilizado para procurar disimular la existencia de la sustancia estupefaciente que portaba en su valija, a lo que se adiciona su presencia en el Aeropuerto Internacional de Ezeiza, en posesión de su pasaporte, pasaje aéreo y el equipaje en cuyo interior se intentó disimular la existencia de la sustancia secuestrada”, dijo el fiscal.
Al ser indagada tras su detención, Rojas se negó a declarar por recomendación de sus abogados, y quedó formalmente detenida en un penal federal, donde permanecerá hasta la realización del juicio, posiblemente el año próximo.