Enfoques mínimamente invasivos reducen el tiempo de recuperación en las cirugías de cáncer de páncreas
El cáncer de páncreas comienza en el páncreas, que se encuentra detrás del estómago. La detección temprana suele ser difícil, ya que los síntomas generalmente solo aparecen cuando el cáncer ya se ha diseminado. Como resultado, su diagnóstico a menudo se produce en una etapa avanzada, lo que complica el tratamiento. El Dr. Michael Kendrick, cirujano hepatobiliar y pancreático de Mayo Clinic, explica cómo la cirugía mínimamente invasiva está acelerando la recuperación.
Una de las principales opciones de tratamiento es el procedimiento de Whipple, una cirugía compleja que extirpa la cabeza del páncreas. Hay tres enfoques para esta cirugía desafiante: abierto, laparoscópico y robótico.
El Dr. Kendrick es especialista en el procedimiento de Whipple laparoscópico. Él dice que, dependiendo de la ubicación y la etapa del cáncer, los pacientes pueden necesitar someterse a un tratamiento extenso antes de la cirugía. Esto facilita el enfoque laparoscópico menos agresivo para el paciente.
“En esta etapa, la cirugía es el único tratamiento que puede ofrecer cura”, dice el Dr. Kendrick.
Sin embargo, para obtener el mejor resultado, la mayoría de los pacientes con cáncer de páncreas deben someterse a quimioterapia y radiación antes de la cirugía para maximizar los resultados del tratamiento. El Dr. Kendrick dice que después de los tratamientos rigurosos antes de la cirugía, los enfoques mínimamente invasivos ayudan a reducir el impacto en la salud del paciente.
“Esto termina siendo mucho menos agotador para el cuerpo que el enfoque abierto, y la mayoría de los estudios demuestran que los pacientes sienten menos dolor, se recuperan más rápido, pierden menos sangre y permanecen menos tiempo en el hospital, lo que ha sido muy beneficioso”, explica.
Una operación laparoscópica significa hacer pequeñas incisiones y utilizar una cámara e instrumentos especiales que atraviesan la pared abdominal para realizar el procedimiento internamente.
“El cirujano se sienta al lado de la mesa quirúrgica, sosteniendo y controlando todos estos instrumentos”, dice el Dr. Kendrick.
Después de la operación, el paciente se despierta con vendajes en lugar de una incisión grande. Estas pequeñas incisiones significan menos dolor debido a la cirugía y un tiempo de curación más rápido.
“El enfoque mínimamente invasivo permite a las personas recuperarse más rápido, lo que les da más esperanza de que después de todo el tratamiento por el que han pasado — quimioterapia, radiación y, por último, cirugía — finalmente puedan recuperar parte de su vida. Y creo que eso es realmente gratificante”, dice el Dr. Kendrick.
Mayo Clinic es líder en el abordaje laparoscópico mínimamente invasivo del procedimiento de Whipple y es uno de los pocos centros médicos que lo ofrecen. El Dr. Kendrick dice que es importante que los pacientes hagan preguntas sobre las opciones de tratamiento disponibles y busquen una segunda opinión para asegurarse de que estén recibiendo el mejor tratamiento posible.