El PRO entre la resurrección y el olvido, de Macri depende….
La historia del PRO comenzó con las limitaciones lógicas por ser solo un espacio distrital que tuvo su epicentro de gloria en CABA, “su lugar en el mundo” y luego gracias a la pericia de Mauricio Macri, quién rumbo a las elecciones del 2015 supo guionar el desarrollo de la historia y “con sutilezas e inteligencia” empujó a los radicales participantes de la Convención Constituyente de Gualeguaychú a integrar un frente político donde aceptaron a regañadientes ser “cola de ratón y no cabeza de león”, así y todo, Cambiemos llegó a la presidencia. El fin justificó los medios, entonces nada que observarle a los integrantes de esa nobel escudería política porque los buenos resultados estuvieron a la vista.
Mucha agua a corrido por debajo del puente del partido “amarillo” y en el medio de ese recorrido nos encontramos con un fallido gobierno de Macri con mas sombras que luces en su gestión, que derivó en una dura derrota en las presidenciales del 2019 a manos de Alberto Fernández, lo cual generó una inevitable decadencia en la ex Cambiemos, reconvertida oportunamente en Juntos por el Cambio, que desembocó “sin preámbulos” en la disolución definitiva del frente. Hoy el PRO atraviesa un triste presente con una falta de identidad importante en su fuerza y siendo partener de un “romance extraño” con La Libertad Avanza, que desde la “primera cita a la luz de las velas” estuvo marcado más por los “odios que por los amores profesados”.
El tire y afloje entre el oficialismo y el macrismo goza de buena salud, el espacio del ex presidente hace su parte y le otorga gobernabilidad a Javier Milei, sobretodo, le da peso específico en el Congreso para esa “estrategia de bloqueo o veto” que ha convertido en moda el Ejecutivo Nacional por esa obsesión que tiene el oficialismo de respetar a rajatabla la inmaculada premisa del déficit fiscal cero. Ya no es un secreto a voces que el acuerdo entre partes está “colgado de un pincel”, un poco por las formas de Milei que no ayudan a la convivencia, porque el libertario es muy partidario a maltratar la figura de Macri cada vez que puede, ninguneando hasta el hartazgo el apoyo del líder del PRO y no escatimando nunca las fuertes críticas a la gestión del ex presidente de Boca, al cual, más de una vez, tildó de “fracasado”.
El PRO transita por estos días por un peligroso camino de ambigüedad ideológica con un evidente deterioro en la propia fuerza por la salida intempestiva de Patricia Bullrich (ex presidenta del partido), reconvertida en leal aliada libertaria de Milei y con Horacio Larreta que- por su lado – hace un buen tiempo “armó rancho aparte”, esos hechos han degastado mucho su estructura partidaria. El espacio hoy cuenta – en estos raros momentos de la política argentina – con 6 o 7 puntos de apoyo popular a nivel nacional, número de votantes que no le alcanzaría para competir con expectativas ciertas en las grandes ligas electorales de Argentina.
Milei conociendo la expuesta debilidad del espacio de Macri tensa al extremo la cuerda, confiado quizás, en el “momento de bonanza” que atraviesa a causa de algunas buenas señales de la macroeconomía, aunque gran parte de los “argentinos de a pie” esa mejoría “no la ven ni la sienten” en sus raídos bolsillos. El proyecto enviado por el oficialismo en las últimas horas al Congreso para la eliminación de las PASO, es una “nueva mojada de oreja” para el PRO, que ya advirtió que no va a acompañar esa iniciativa y es más, va oponerse firmemente. Sin las intermedias, que sirven como un necesario ordenador electoral, el macrismo estaría en problemas para poder “mojar a su gusto el pan en la salsa de las listas” nacionales en un supuesto espacio en común que conformen con La Libertad Avanza o al menos tener alguna incidencia en el armado de las mismas. “Si hay miseria, que no se note”, supo decir Jorge Luis Borges y algo de eso necesita mostrar el macrismo para resistir el final.
Es un rumor a voces en el entorno del presidente libertario que tanto Karina Milei como Santiago Caputo no quieren para nada compartir con el PRO lugares de prominencia en un futuro armado electoral, es más, la puja entre el funcionario de confianza del presidente y Macri escaló a niveles insospechados de desencuentro, lo cual aleja cualquier estadio de acuerdo entre ambas partes. En el lanzamiento de las “Fuerzas del Cielo”, autopercibidos como el “brazo armado de Milei”, los organizadores (El Gordo Dan entre ellos) hicieron un contundente llamado a los fieles de la logia para que ocupen todos los lugares de las listas de cara al 2025. Teléfono para el PRO: “Si te he visto, no me acuerdo”, esta por verse si del otro lado del tubo reciben el mensaje y obran en consecuencia.
¿Cuál es el rol de espacio de Macri en toda esta historia que lleva once meses de fiel acompañamiento? “Hasta ahora solo servimos para tenerle la vela al presidente”, fue la queja que deslizó a este medio un dirigente del PRO santafesino sobre el particular momento del partido y del especial vínculo con el oficialismo. Lo que queda en evidencia en estos tiempos tan esquivos para el macrismo es que el valor que hoy tiene el espacio de Macri dista muchísimo de aquellas épocas de esplendor partidario y de las rutilantes “olas amarillas” que dominaron oportunamente la política argentina. La ayuda incondicional a los vetos presidenciales para frenar las leyes de movilidad jubilatoria o de financiamiento universitario no hicieron más que dejar en evidencia cierta obsecuencia y genuflexión de parte del PRO. “Les dimos la mano y se tomaron el codo”, compartió con este portal su enojo un militante rosarino de esa fuerza, muy molesto por el permanente ninguneo de Milei hacia Macri.
“Si nosotros seguimos apoyando como lo venimos haciendo y valemos cero, estamos avisando que el Congreso puede convertirse en un calvario para Milei sin decretos y sin nosotros la gobernabilidad le será muy difícil”, amenazan puertas adentro del PRO, aunque por ahora esa advertencia solo se circunscribe a los campos de la dialéctica. Macri por estos momentos se dedica a monitorear el escenario político sabedor él que sin su apoyo a Milei le entrarían todas las balas en el Parlamento, el déficit cero sería una quimera imposible de cumplir y el regreso del peligro de los “dos tercios” agitaría nuevamente el fantasma más temido por el libertario: el “juicio político”. “Con o sin noches de milanesas”, Macri está obligado a tomar una urgente decisión, la resurrección del PRO o la elección de la hora de su muerte dependerá de ello, inevitablemente será así, pese a quien le pese…