El peronismo santafesino en la difícil encrucijada de ¿volver a ser lo que fue o desaparecer?
“El que quiera conducir con éxito tiene que exponerse; el que quiere éxitos mediocres, que no se exponga nunca; y si no quiere cometer ningún error, lo mejor es que nunca haga nada” – J. D. Perón
¡Se buscan nuevos dirigentes! es el cartel que debería estar colgado en cada puerta de ingreso de las Sedes Departamentales que dispone el PJ en Santa Fe, para poder propiciar de esa forma la reconstrucción del partido después de lo que fue la durísima derrota electoral que padeció en el 2023, donde no solo perdió el Ejecutivo provincial sino que tampoco pudo quedarse con la intendencia de ninguna ciudad relevante de la provincia y lo que agravó su cuadro de situación política, es que ni siquiera logró acceder al control de Diputados, como si lo habían conseguido los gobernadores que antecedieron a Omar Perotti, ha sabiendas de la importancia que tiene para un espacio la Cámara Baja de Congreso, como herramienta para seguir generando políticas de cara al futuro.
El “gran dilema” que se atraviesa hoy en el camino del peronismo provincial es saber ¿qué referentes puede proyectar el partido como candidatos de cara al año electoral del 2025?, un interrogante que hoy no encuentra una respuesta convincente dentro del espacio debido a la falta de nombre propios en el PJ que permitan tener expectativas ciertas por un buen resultado en las urnas. Omar Perotti, el ex gobernador, es sin dudas, el principal referente del peronismo santafesino que puede llegar a darle competitividad a la fuerza política, aunque el actual diputado provincial esta hoy más abocado a su labor parlamentaria que ha propiciar alguna estrategia electoral en lo inmediato.
Otros de los nombres que surge dentro del PJ en Santa Fe, es el senador nacional, Marcelo Lewandowski, a pesar que el outsider que representó al peronismo en la ultima justa electoral no cuenta con mucho consenso dentro del propio partido, sobretodo, por no haber accedido al pedido de muchos dirigentes del espacio que le exigían jugar como candidato a la Intendencia de Rosario. Al ex periodista deportivo en el último tiempo también le ha jugado en contra haber romantizado, con una frase impropia, el actuar del joven sicario que terminó con la vida del playero de la estación de servicio en la zona sur de Rosario. “Lewandowski no nos representa”, supo reafirmar a este medio un joven militante del peronismo rosarino al ser consultado sobre el valor propio que tiene el legislador dentro del PJ.
El peronismo santafesino necesita un imperioso cambio generacional de dirigentes que debería empezar a promoverse en los ámbitos universitarios, sociales, gremiales y políticos, donde le sería más fácil echar la mano a jóvenes militantes dispuestos a propiciar la reconstrucción que amerita el momento de incertidumbre que atraviesa a la estructura política. El principal desafío que deberá enfrentar el PJ en Santa Fe es liberarse de la etiqueta “kirchnerista” que hoy en la provincia actúa como “un salvavidas de plomo” y que atenta contra cualquier posibilidad de éxito del espacio en lo electoral. Las repetidas derrotas padecidas en las urnas por cuanto político se ha embanderado con el kirchnerismo (Agustín Rossi, Marcos Cleri, Leandro Busatto y hasta el propio Lewandowski en el 2023 por citar algunos casos) solo sirven para confirmar la fuerte negación que tiene el santafesino medio al momento de votar a cualquier candidato identificado con esa fuerza.
En este “nuevo resetear” que se impone en el peronismo para generar otro armado en Santa Fe, quizás deberán prestarle algo más de atención a la mano extendida por ayuda que hizo pública oportunamente, el ex candidato a la presidencia, Juan Schiaretti, y que empezaría a ser efectiva luego del 25 de mayo, como advirtieron a este portal desde el propio entorno del ex gobernador de Córdoba. El PJ cordobés quiere trasladar el éxito de su experiencia doméstica al contexto santafesino, recordemos que la construcción política en la provincia mediterránea involucra además del peronismo local a otras ideologías como el socialismo, sectores del PRO y radicalismo. Eso le ha permitido al espacio acceder al apoyo en las urnas de un votante que trasciende la impronta peronista, de paso, romper algunos mitos instalados en la historia política argentina y que han sido exacerbados por la grieta.
No son pocos los dirigentes dentro del PJ santafesino que ven viable y aplicable la forma de armado de estructura electoral que llevan adelante en Córdoba, ya que consideran que la llegada al poder de Javier Milei ha reconfigurado el GPS de la política en el país y eso los obliga a tener que generar un nuevo espacio de convergencia, que tal vez, deba ser multipartidario, para con ello poder fomentar la necesaria defensa de la democracia que pregonan. La vicegobernadora de Santa Fe, Gisela Scaglia pidió por la incorporación de La Libertad Avanza dentro de Unidos, lo que significa, en caso de concretarse, la inmediata salida del Socialismo del espacio que integra. “Porque no, generar una alternativa política junto al partido de la Rosa, al Frente Social de Carlos Del Frade, al sector de Giustiniani, la Izquierda y hasta podríamos convocar a Ciudad Futura”, pensó en voz alta un histórico dirigente peronista No K de la provincia en contacto con este medio web.
El principal reclamo que se hace puertas adentro del peronismo, pasa por la falta de generosidad de los dirigentes que conducen al partido, lo que ha atentado gravemente contra ese sentido de pertenecía que ha caracterizado al espacio a lo largo de su historia. Dentro de la estructura no son pocos los que denuncian la elección de cargos a dedos, las listas de unidad digitadas, las elecciones internas abortadas por intereses personales y la recurrente falta de representatividad de muchos sectores en la vida del espacio. Se puede decir que los motivos descriptos sean solo algunas de las razones por las cuales el PJ ha perdido no solo su encanto en la provincia, sino el acompañamiento popular tan necesario para permitir el traspaso generacional de sus ideales partidarios. “Si buscas resultados distintos no hagas siempre lo mismo”, la frase de Albert Einstein ya debe tener contar con muchos adeptos dentro de la fuerza.
Mientras el gobierno de Javier Milei cosecha amores y odios por las impiedades que provoca su gestión, el peronismo esta obligado a dar el “salto de calidad” que le reclama parte de la sociedad para poder hacerse cargo de la representación de la oposición en la Argentina. En el microclima político que siempre distingue a Santa Fe, dentro del PJ no son pocos los militantes y dirigentes que piden impulsar un verdadero cambio y que para llevarlo adelante exigen que todos – sin distinciones – deben comenzar a trabajar desde el llano, y a partir de allí empezar a reinventar el espacio, aunque advierten que ese proceso deberá realizarse sin imposiciones ni personalismos, para que solo las acciones políticas que cada uno propicie vayan perfilando a los nuevos liderazgos dentro del partido y hasta citan la frase de Perón, “esos melones que se acomodan en el carro al andar”, para respaldar esa idea. El PJ santafesino está urgido a replantearse su destino y en esa búsqueda de un mejor estadio para su estructura política necesita que el “todos unidos triunfaremos” sea más representativo de todo el espacio y no solo de esa pequeña parte que – transitoriamente – ejerce la conducción partidaria.