El gran ritual de los “jinetes del rock”: Airbag brindó un histórico show en el Hipódromo rosarino
El Hipódromo de Rosario fue testigo de una noche que quedará grabada de manera indeleble en la memoria de los miles de asistentes al show. La banda de los hermanos Sardelli, Airbag, se plantó frente a una alerta climática amenazante y salió victoriosa, brindando un espectáculo masivo, electrizante, lleno del “rock del bueno” y con una entrega musical desde el escenario, pocas veces vista en la ciudad.
La jornada del viernes 28 de noviembre de 2025 comenzó con la incertidumbre meteorológica, pero ni las nubes amenazantes, ni el mal pronóstico en ciernes, pudieron detener la marea de seguidores que, desde temprano, colmaron los espacios aledaños al lugar del recital. El Hipódromo se mostró repleto de fanáticos y fanáticas de todas las edades, el cartel de entradas agotadas se colgó horas antes al evento, demostrando la “enorme transversalidad generacional del poder de convocatoria” de Airbag.
Cerca de las 20:45 horas, con una puntualidad que permitió calmar la ansiedad del público presente, la banda encendió la velada para emprender un viaje de más de tres horas. Hay que destacar – una vez más – la excelente organización del evento, que priorizó atender desde el primer instante, la seguridad y comodidad de los espectadores, algo indispensable para un marco de convocatoria tan multitudinario. Ese fue un punto crucial, para que la experiencia de un público adulto y exigente, sea lo más placentera posible.
Un viaje musical sin respiro por su obra
Patricio, Gastón y Guido Sardelli demostraron, por qué son una de las bandas de rock más importantes de la escena actual, combinando la potencia de sus éxitos con joyas inesperadas y guiños a la historia del rock. El show arrancó con la potencia de “Jinetes cromados y Anarquía en Buenos Aires”, marcando un pulso frenético para la noche. El recorrido por su discografía fue exhaustivo, con temas como “Fugitivo”, “Perdido” y la aclamada “Vivamos el momento”. Hubo espacio para el rock más crudo (El hombre puerco, Motor enfermo) y también para los grandes himnos (Cae el sol, Tu locura).
El repertorio, que rozó los 50 temas, se destacó por su generosidad y por la inclusión de impactantes covers que hicieron vibrar a la multitud: La dulzura de The Beatles con here comes the sun y all my loving (este último con Gastón al frente, ovacionado). El virtuosismo de Dire straits con sultans of swing. El clasicismo de Creedence clearwater revival con have you ever seen the rain y el toque emotivo del tango, honrando a la música argentina con “Volver” de Carlos Gardel. Mención aparte merece el momento íntimo y despojado con el “Gran encuentro” en Acústico, una pausa reflexiva y conveniente antes de la arremetida final.
El cierre fue a todas luces, monumental; la energía de “Relámpagos”, “Como un diamante” y la explosión de “Kalashnikov” condujeron a un broche de oro atípico y profundamente identitario: el “Himno Nacional Argentino”, que resonó en el predio con un sentido de pertenencia inigualable, para terminar con el poderoso “Solo aquí”. La banda de los hermanos Sardelli brilló en Rosario, no solo por el impecable show brindado, sino al demostrar que el rock nacional tiene la capacidad de seguir montando espectáculos de tan imponente magnitud, uniendo a generaciones bajo el mismo cielo. Airbag, lo hizo nuevamente, miles de testigos de su obra, pueden dar una debida fe de ello.