El gobierno provincial cambió las autoridades de seis unidades carcelarias
El Ministerio de Seguridad de la provincia, a través del Servicio Penitenciario, dispuso el cambio de las autoridades de las cárceles de Coronda, Las Flores, Cárcel de Mujeres Santa Fe, Rosario, Piñero y Complejo Penal Rosario.
El director general del Servicio Penitenciario, Gabriel Leegstra, puso en funciones esta semana a los siguientes directoras y directores: Alejandro Silva en la cárcel de Coronda; Mauricio Miriani y Alfredo Sánchez como director y subdirector, respectivamente, en Rosario; Alejandro Brondetta (director) y Martín Vivas (subdirector) en Piñero; Gabriela Tarnowski en la Dirección de Capacitación; Paola Suárez en el Complejo Penal Rosario; Natalia Castillo en la Cárcel de Mujeres de Santa Fe; Rodrigo Godoy (director) y Sergio Alvelo (subdirector) en Las Flores; y Gisela Pasini (directora) y Gustavo Tavisi (subdirector) en la Alcaidía de Santa Fe .
Al respecto, Leegstra expresó: “Estos cambios tienen que ver con un reordenamiento de personal y funciones que hacemos en la mayoría de las unidades. El objetivo es doble: por un lado que el personal, que son alcaides mayores en su mayoría, sigan aprendiendo, tomando experiencia con nuevos conocimientos en distintas unidades, perfilándolos para su próxima jerarquía que será pertenecer a la plana mayor; y por el otro lado, darle ritmo con conducciones nuevas, en diferentes lugares, con mandatos distintos. Son directoras, directores y también subdirectores los que decidimos asuman a los largo y ancho del servicio penitenciario provincial”.
Asimismo, respecto de las mejoras en las que se viene trabajando en materia de seguridad, Leegstra explicó que “hay nueva tecnología para control de ingreso, eso requirió una logística y una reorganización de funciones y horarios, y metodologías para amoldarnos a eso. Paleta, body scanner, escáner de bolsos y detector de metales. Todo eso el Ministerio de Salud lo autorizó junto con la Dirección de Radiofísica”. En ese sentido, agregó que “hemos detectado infinidad de elementos que no se podían encontrar, sobre todo porque venían en las zonas íntimas de la mujer. Droga, teléfonos, partes. Eso es parte de nuestro trabajo y así está funcionando”, concluyó.