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Central y el eterno karma de jugar como visitante. El canalla perdió ante Defensa y el ingreso a alguna copa parece un sueño muy lejano

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Central llegaba a Florencio Varela con el buen impulso de su gran victoria frente al puntero Vélez en el Gigante. La tarea para Lequi es mantener todo lo bueno hecho en el cotejo anterior, esa intensidad y orden que tuvo su equipo que le permitieron ganarle a un rival que hasta ese momento lucia inexpugnable. Defensa y Justicia viene realizando una muy mala campaña en el torneo local ubicándose en los últimos lugares en la tabla de posiciones con lo cual permitía tener buenas expectativas para el encuentro.

El partido arranco con una mejor postura del local, con mucha dinámica en la mitad de la cancha con Schamine y Kevin Gutiérrez como dos motores que marcaban el ritmo del partido. Ese mejor andar se plasmó en la red cuando a los 12´ tras una buena jugada colectiva del local que terminó con un centro de Tobías Rubio desde la derecha y un buen cabezazo de Miritello para derrotar a Broun para marcar el 1 a 0.

Tres minutos después llegó el segundo y lo marcó nuevamente Miritello quien tras una gran asistencia de Alexis Solo, con un toque sutil venció a Jorge Broun que cuando quiso reaccionar ya era tarde y se consumó el 2 a 0 en favor del Halcón. Un resultado duro para el canalla que en el primer tramo de la etapa se encontraba muy lejos en el tanteador. Eso obligaba a los dirigidos por Lequi a modificar rápidamente su postura, que para nada había sido buena hasta entonces.

El resto de la etapa agudizó el mal andar del canalla que nunca pudo encontrar los caminos para inquietar a Bologna. Flojo rendimiento de Malcorra que nunca fue la manija, inexpresivo Copetti y ni Diacone ni Lovera fueron una solución en el ultimo tramo de la cancha. Se fue al vestuario el auriazul penando una dura derrota transitoria por su mal desempeño en la primera etapa.

En el complemento, el canalla no hizo modificaciones, su entrenador consideró que mantenerle la confianza a los once que empezaron el cotejo. Habían transcurrido pocos minutos y Lequi mandó al campo a Marco Rubén por Lovera para intentar tener mas peso ofensivo. Cerca de los 20´ el propio Rubén tuvo el descuento, pero Bologna evitó el tanto del delantero canalla.

Central mostraba una mejoría, pero no lastimaba en ataque y recién a los 29´ pudo lograr el descuento cuando Quintana de cabeza puso el 2 a 1 transitorio y generaba expectativas para poder intentar empatar el encuentro. Los quince minutos finales no cambiaron demasiado el contexto de juego, el canalla siguió penando de los viejos errores cada vez que sale de su casa. El pitazo final castigó al auriazul que volvió a decepcionar y casi quedó fuera de juego en la disputa por entrar a alguna copa internacional. El interrogante pasa por saber cómo el técnico va a motivar a sus jugadores para lo que resta del año y como van a convivir los hinchas con ese escenario tan a contramano de su historia.

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