Caputo debió salir a negar de plano una devaluación y ratificó el “crawling peg”
El ministro de Economía, Luis Caputo, se vio hoy obligado a aclarar que el gobierno no analiza una devaluación. Y cuestionó los “infundados rumores” que están circulando. Caputo eligió las redes sociales para tratar de llevar calma a un mercado que elevó la cotización de los dólares blue y financieros por encima de los $1.300.
“Ante los infundados rumores, aclaramos con Santiago Bausili, que en caso de que se apruebe la ley Bases, la baja del impuesto país no viene asociada a ninguna devaluación”, dijo el jefe del Palacio de Hacienda.
Y también aseguró que “tampoco se tocará el 80/20”, el mix con el que se permite liquidar a los exportadores, “ni el crawling de 2 por ciento mensual”, el nivel de depreciación del peso en el mercado oficial.
Más temprano, Caputo les había dicho a los empresarios que “no hay condiciones macro para que haya susto”. El ministro de Economía culpó a la oposición por la suba del dólar y negó que haya una crisis.
Se mostró confiado además en la aprobación de un desembolso de US$ 800 millones por parte del Directorio del Fondo Monetario este jueves, a la vez que prometió un nuevo programa con el organismo, en medio de tensiones cambiarias y la incertidumbre sobre la Ley Bases que será tratada este miércoles en el Senado.
“Lo que pasó en el mercado es que la política va a tratar de meter la cola, pero no se enganchen con eso. La macroeconomía está ordenada”, dijo.
Y reclamó: “No se coman el cuento, tenemos superávit fiscal, comercial, de cuenta corriente, la situación está muchísima más sólida, es una oportunidad histórica, no hay sobrante de pesos para hacer daño”, durante un evento organizado por la Fundación Libertad y Progreso yb el instituto Cato. Consultado sobre las tensiones cambiarias, Caputo se mostró optimista. “No me asusta, no va a haber crisis”, sostuvo.
“En su totalidad, es atribuible a la política, es una lástima porque mayo fue un mes espectacular, antes de este ataque político, el riesgo país era de 1.200 puntos y el dólar estaba en $ 1.100, fue récord superávit fiscal y la inflación bajó a la mitad respecto de abril”, explicó, y afirmó que la mejora de las condiciones financieras “se demoró, nada más”.