El diputado Del Frade promueve una iniciativa para llevar adelante un proyecto cultural en la cabecera del puente Rosario-Victoria
El diputado provincial Carlos del Frade presentó un proyecto en la Cámara de Diputados para que “las 300 familias del barrio Remanso Valerio de Granadero Baigorria sean escuchadas en su proyecto cultural antes de avanzar en el promocionado desarrollo inmobiliario en la cabecera del puente Rosario Victoria”. El legislador recibió a una delegación de estos pobladores, quienes manifestaron su preocupación por los efectos socioambientales de esta propuesta gubernamental.
Del Frade plantea concretamente que “ante la aceleración del proyecto mencionado”, representantes de las 300 familias ubicadas en el Remanso Valerio, “con escrituras y décadas en el lugar, necesitan una reunión con responsables del gobierno provincial, en las próximas semanas, antes del inicio de las obras”.
El desarrollo inmobiliario tendrá más de ocho hectáreas destinadas a zonas de recreación y paisajista. La intervención contempla un total de 8,5 hectáreas, con 2.500 metros cuadrados de playones deportivos, mil metros lineales de circuito aeróbico para peatones y ciclistas aprovechando la calzada del lugar y 330 metros para estacionamiento de vehículos.
También habrá un sector con 2.550 arbustos y todo el entorno tendrá iluminación LED. Además, incluye la ampliación de un tramo de 1.100 metros de la avenida Eudoro Carrasco, que tendrá un ensanche de veredas con fines recreativos, gastronómicos y comerciales.
En tanto, quienes viven desde hace décadas en el lugar, tienen un proyecto propio para salvaguardar sus viviendas, y también la identidad del barrio, con su impronta cultural pesquera. Para eso, diseñaron una idea para declarar el barrio y zona aledaña de interés cultural y turístico.
“La irrenunciable lucha por el arraigo”, tiene como lema este proyecto al que califican de federal, familia y cultural. Dado que la zona es identificada en todo el mundo con la canción de Jorge Fandermole Oración del remanso, sus pobladores pensaron “la creación del museo del pescador; taller artesanal en arcilla, madera, telas, tejido varios; “quincho” gastronómico nutrido de total variedad ictícola; paseo-visitas dirigidas entre callecitas, casas y costa; excursiones por el rio e incluso cruce y recorrido entre las islas, apreciando la vida silvestre”, según consigna Del Frade en los considerandos de su proyecto.
En esas visitas guiadas incluyen el paso por lugares especiales como la Gruta de Itatí, Capilla, Escuela y el especial ícono y emblema Protector: “El Cristo Pescador”.
“La comunidad del Remanso Valerio detenta hoy perfil propio, personalidad, tono psicológico; es decir, ejerce y proyecta Identidad”, es parte de la fundamentación del proyecto de quienes hoy habitan el barrio.
“Este barrio -hoy a la sombra de una gigantesca obra civil: puente Rosario-Victoria- exhibe de manera rotunda su rasgo inconfundible. La pesca artesanal que durante decenas de años ejercieron sus miembros agoniza ya a causa de la pesca industrial irracional, devastadora, que impulsa el mercantilismo y la connivencia cómplice de organismos estatales que debieran impedirla”, dicen con elocuencia.
Del Frade se hace eco de una oferta-ofrenda “capaz de conciliar intereses de partes que permitan comunitaria y zonalmente propiciar el bien común”.