Haití: bandas armadas vuelven a atacar Puerto Príncipe antes de instalarse el consejo de transición
Bandas armadas lanzaron nuevos ataques en Puerto Príncipe, la capital de Haití, antes de la instalación de un consejo de transición que marcará el comienzo de un nuevo gobierno, informaron el domingo medios locales, que reportaron incendios provocados e intensos disparos en el centro de la ciudad.
La zona de Lower Delmas se está convirtiendo en “un campo de batalla entre la policía y grupos armados”, indicó Radio Tele Galaxie en su cuenta de X, añadiendo que se escucharon fuertes explosiones en las cercanías del ayuntamiento del barrio, así como disparos de armas automáticas cerca del Palacio Nacional.
En redes sociales circularon dos grabaciones de voz que usuarios atribuyeron al líder pandillero Jimmy “Barbeque” Cherizier aparentemente ordenando a sus hombres quemar casas en Lower Delmas, una zona empobrecida de la capital donde creció.
“Continúa quemando las casas. Que todos se vayan”, expresa un hombre en la primera grabación de audio. En otro, señala que ha enviado bidones de gasolina: “No hace falta saber qué casa. Quema todas las casas que encuentres. Prende fuego”, dice.
Reuters no pudo verificar la grabación, pero una residente del área dijo a Reuters que había visto casas en llamas.
Las instalaciones médicas de la Universidad Estatal de Haití también fueron saqueadas por pandillas durante la noche, informó Radio RFM, mientras que también se reportaron ataques en el suburbio de Petion-Ville, en la ladera de una colina.
El recrudecimiento de la violencia se produce mientras el país se prepara para la instalación de un consejo presidencial de transición compuesto por nueve miembros que reemplazará al primer ministro Ariel Henry, quien anunció su dimisión el 11 de marzo.
Las pandillas haitianas, muchas de las cuales se han agrupado bajo una alianza conocida como “Viv Ansanm” (Vivir Juntos), aseguraron que su asedio a la capital es una batalla para derrocar a Henry. Grupos de derechos humanos estiman que alrededor del 90% de la capital está ahora bajo control de bandas armadas.