La junta militar de Níger acusó a Guterres de impedir su participación en ONU
La junta militar de Níger declaró este sábado que el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, junto con las autoridades francesas, impidieron la participación de representantes nigerinos en la Asamblea General al revocar la acreditación del representante permanente del país ante la organización.
“El Secretario General de la ONU, en connivencia con Francia y los jefes de Estado francófonos de la Cedeao (Comunidad Económica de Estados de África Occidental), no cumplió su obligación al impedir que Níger participara en el 78 período de sesiones de la Asamblea General de la ONU”, dijo el vocero de la junta militar de Níger, Amadou Abdramane, a la cadena de televisión RTN, informaron las agencias de noticias Europa Press y Sputnik.
Según el portavoz del gobierno de transición, Guterres no solo se negó a aceptar la lista oficial de delegados de Níger, sino que “satisfizo la petición fanática del exministro de Relaciones Exteriores (de Níger) de retirar al representante permanente de Níger ante la ONU”.
Según el comunicado, los militares en el poder en Níger condenan enérgicamente la decisión del secretario general de la ONU, calificándola de “injerencia en los asuntos internos del Estado”.
La junta militar envió a su ministro de Relaciones Exteriores a la ONU, pero Guterres rechazó incluirlo en la lista de delegados e impidió que se dirigiera al pleno.
Según la ONU, se habían recibido dos solicitudes por separado para participar en la Asamblea General: una del Gobierno depuesto y otra por parte de la junta.
La instauración del nuevo gobierno
El pasado 26 de julio, un grupo de oficiales integrados en el Consejo Nacional por la Salvaguarda de la Patria (CNSP) proclamaron la destitución del presidente de Níger, Mohamed Bazoum, alegando “el continuo deterioro de la situación de seguridad” y la “mala gobernanza económica y social”.
Dos días después se anunció que el general Omar (Abdourahamane) Tchiani, excomandante de la guardia presidencial, asumía la jefatura del CNSP y las funciones de “presidente de transición” en Níger.
Numerosos países y organismos internacionales condenaron en términos enérgicos el golpe militar en Níger, suspendieron sus programas de cooperación con el país africano y exigieron la restitución del orden constitucional.
Este es el quinto golpe de Estado que vive Níger desde que en 1960 obtuvo la independencia de Francia, además de varios intentos frustrados, el último de ellos en 2021, días antes de que el ahora derrocado presidente asumiera el cargo.