Habló uno de los sobrevivientes de la masacre de Uganda: “Me cubrí con la sangre de mis compañeros”
Unas 41 personas fueron asesinadas el pasado 16 de junio en la masacre dentro de una escuela de Uganda. Uno de los alumnos sobrevivientes fue Julius Isingoma, quien contó cómo fue el lamentable suceso que le tocó vivir a él y al resto de sus compañeros por parte de presuntos rebeldes islamistas.
“Me unté la sangre de mis colegas muertos en la boca, las orejas y la cabeza para que los atacantes pensaran que estaba muerto”, dijo el joven ante la BBC en una entrevista que se hizo en el Hospital General de Bwera, en el distrito de Kasese.
De acuerdo a su relato, los atacantes eran hombres armados que arribaron al lugar cerca de las 22. Estos se encontraron con que los alumnos habían bloqueado la puerta de ingreso al dormitorio, porque advirtieron que estaban en peligro.
“Cuando no pudieron abrir la puerta, arrojaron una bomba dentro del dormitorio y luego usaron martillos y hachas para derribarla”, comentó el sobreviviente.
Mientras él se encontraba lejos de la puerta, sus compañeros formaron un escudo para evitar el ataque, pero fueron asesinados a disparos cuando los violentos ingresaron.
Ante esto, Isingoma decidió subir a la parte de arriba de una litera, sacó maderas del techo y saltó adentro para esconderse.
El joven vio la masacre, pero luego cayó por el humo de los colchones que habían prendido fuego los asesinos antes de marcharse. “Cuando me abrumó el humo caí en el dormitorio con un golpe seco”, reveló.
Por ese sonido, los atacantes regresaron y el chico debió actuar rápido para sobrevivir: “Me acosté junto a los cuerpos ensangrentados de mis amigos y tuve que pensar muy rápido. Luego me unté mucha sangre en los oídos, la boca y la cabeza”.
“Cuando llegaron los militantes me revisaron la muñeca para ver si tenía pulso y se fueron”, finalizó.