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Doctor Jekyll y míster Hyde: Newells “modo torneo local” volvió a dejar una pobrísima imágen al empatar con Unión

Newells recibía a Unión en el Marcelo Bielsa con el envión anímico que le entregó la clasificación del equipo a los octavos de final de la Copa Sudamericana. El rival atraviesa una difícil situación con el promedio y ocupa los últimos lugares en la tabla de posiciones, lo que a priori entregaba muchas expectativas para alzarse con una victoria.

El comienzo del partido tuvo a la lepra muy activo dentro del campo de juego, con mejor circulación de pelota en la mitad de la cancha y la dinámica característica de los equipos de Heinze hacia el resto. El rojinegro merodeo el gol en los primeros minutos cuando a los 9’ un remate de Brian Aguirre desde la puerta del área encontró el palo de Mele y en el rebote se lo perdió Recalde por no ser más enjundioso al ir a buscar el rebote.

A los 12’ una jugada armada desde la derecha por Brian Aguirre terminó en un centro perfecto para la cabeza de Ferreira que hizo estrellar el testazo en el parante derecho, otra vez el mismo vertical le quitaba a Newells la posibilidad de abrir el marcador, que a esa altura era totalmente justificado por el hecho pro el local.

El partido también tuvo un par de acercamientos del Tatengue pero las mismas fueron provocadas más por errores en la salida de la lepra que por virtudes del conjunto santafesino, solo Zenón, Luna Viale y Machuca proponían algo distinto dentro de un conjunto muy limitado. El cotejo promediando la etapa entró en una meseta donde ninguno de los dos pudo generar supremacía sobre el otro. En ese lapso el partido se tornó previsible y aburrido en su trámite.

A los 25’ Newells llegó al gol después de un gran remate de media distancia de Cristian Ferreira que no pudo retener Mele y esta vez si capturó el rebote en el arquero el paraguayo Recalde que con un tiro corto señaló el 1 a 0. Un tanto que le permitía a la lepra jugar con mayor tranquilidad el encuentro.

El resto del primer tiempo fue para completar el tiempo estipulado de juego, porque Newells retrocedió en el campo y le cedió el balón a la visita que no supo darle un correcto uso al mismo y por esa razón Lucas Hoyos vivió un tranquilo cierre de la etapa. Se fueron al vestuario con sensaciones opuestas, el local con la calma por el deber cumplido y Unión masticando el enojo de su entrenador Méndez por la mala imagen que deñó el equipo en el campo.

El complemento comenzó con la lepra mejor predispuesto en el partido, pudo haber aumentado la diferencia en el arranque cuando le anularon un gol a Brian Aguirre a instancias del VAR en una jugada que generó muchas dudas a pesar del trazado de líneas que invalidó la jugada.  

Pero este Newells que desconcierta sufrió el empate de Zenón tras una desatención defensiva que no se entiende para un equipo de alta competencia en el fútbol argentino. El 1 a 1 llenó de dudas al local que volvía a padecer por su irregular andar en el torneo local. La lepra sufre del extraño caso del doctor Jekyll y míster Hyde, uno se muestra sólido en el torneo internacional y el otro transita con su pálido andar el campeonato doméstico.

El encuentro luego de la igualdad cayó en una apatía total, la impotencia de la lepra para acercarse a Mele y el conformismo de Unión para no arriesgar más de la cuenta. La lepra volvió a mostrar las enormes limitaciones que tiene el equipo, que no tiene plan de juego alternativo para superar las adversidades. Este Newells modelo torneo local deja muchísimo que desear a pesar de ser los mismos protagonistas de la copa internacional.

La Copa Sudamérica sostiene a Heinze en Newells, mientras la suerte lo acompañe en ese torneo, poco se lo criticará por el mal andar de su equipo en la liga local. En el fútbol todo es relativo, y cuando un proyecto no se sustenta con hechos palpables, la historia, tarde o temprano, te empieza a pasar factura. Ojalá que el técnico cambie su libreto, por el bien del hincha y sobretodo, para poder justificar con argumentos válidos que su llegada al club valió la pena.

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