Newells y el karma de jugar de visitante: La lepra volvió a dejar una desteñida imágen en Junín
Newells comenzaba la 19 fecha del torneo local frente a Sarmiento en Junín, campañas parecidas, irregulares, solo dos puntos distanciaban al rojinegro del local en la tabla de posiciones. La lepra con muchas variantes, como suele ofrecer el equipo de Heinze con el correr de los partidos.
El partido comenzó con mucho cuidado de ambas partes, la cautela le quitó emotividad al cotejo. No pasó absolutamente nada hasta la media hora de juego. Newells estaba mas preocupado en contener al rival que en generar juego propio. Heinze pensando en la Copa Sudamericana y en la visita a Santos, guardo titulares y el equipo alternativo poco y nada ofreció dentro del campo.
Recién a los 31 minutos se pudo contabilizar la primera aproximación seria leprosa al arco contrario, cuando Gianni metió una buena pelota en dirección de Reasco y el centro del ecuatoriano encontró la cabeza de Portillo, que no pudo impactar bien el balón y este se fue desviado.
Se fueron al vestuario inmerso en un empate signado por la abúlica actuación de los equipos. Fue tan aburrido todo que el pitazo del arbitro señalando el fin de la etapa fue tomada como un gesto de alivio para los hinchas que se acercaron al estadio Eva Perón.
En el complemento, para anotar en la bitácora de situaciones de riesgo nos encontramos con un remate de Portillo que contuvo con seguridad el portero Meza. El equipo de Heinze dio la sensación de ser más con la pelota a partir d los ingresos de Iván Gómez, Sordo, Pitton y luego Recalde, pero no mucho más que eso.
A los 32 minutos del segundo tiempo, Newells creó la primera situación de verdadero peligro de gol del partido tras una buena escapada de Méndez por derecha, un centro atrás de Reasco para la llegada de Portillo y el remate del volante encontró bien parado al golero Meza.
Lo que quedó del cotejo fue para agravar la falta de jerarquía que mostraron los protagonistas al momento de disputar el encuentro. Un lánguido trámite que se hizo difícil de digerir como espectador y que marcó una nueva actuación en falso de la lepra de visitante y que a esta altura solo sostiene este magro presente futbolístico los buenos resultados obtenidos en el torneo internacional. Newells volvió a quedar en deuda con su gente y el crédito de la paciencia, poco a poco, empieza a agotarse.