La mejor tenista del mundo criticó al circuito por su postura con la guerra en Ucrania: “Hubiera ayudado a parar la agresión”
La polaca Iga Swiatek se mostró a favor de prohibir jugar a rusos y bielorrusos en las competencias.
La tenista polaca Iga Swiatek, número uno del mundo, opinó sobre la Guerra Rusia-Ucrania y aseguró que el tenis debería haber optado una mejor medida, en la cual debió mandar un mensaje más fuerte prohibiendo jugar a rusos y bielorrusos, y comparó la situación con los tenistas alemanes, italianos y japoneses tras la Segunda Guerra Mundial.
Si bien consideró que no es la culpa de los atletas la situación en Rusia, aclaró en una profunda entrevista con la cadena británica BBC que el deporte es también muy importante porque históricamente es “usado como propaganda”.
“He oído y leído que después de la Segunda Guerra Mundial no se permitió jugar a los alemanes ni a los japoneses ni a los italianos y creo que este tipo de cosas demostraría al gobierno ruso que quizá no merezca la pena. Sé que es una parte pequeña, porque solo somos atletas, pero creo que el deporte es muy importante y siempre se ha usado como propaganda”, analizó.
En ese sentido, la joven de 21 años consideró que “el tenis, desde el principio, podría haberlo hecho un poco mejor a la hora de mostrar a todo el mundo que los tenistas están en contra de la guerra”.
“Podrían hacer más para dejar claro ese punto de vista y contar sus opiniones y ayudarnos a sobrellevarlo un poco mejor en los vestuarios, porque el ambiente es bastante tenso”, profundizó.
Al mismo tiempo, apoyó a la tenista rusa Daria Kasatkina porque “dijo abiertamente que estaba en contra de la guerra al principio y que su sueño sería que la guerra terminara”. “Es algo que respeto mucho, porque me parece valiente que los atletas rusos digan eso. Su situación es bastante complicada y a veces les cuesta hablar en voz alta de ello”, explicó.
En abril del año pasado, Wimbledon fue el único torneo que no permitió la entrada de jugadores rusos y bielorrusos, lo que le valió fuertes sanciones económicas, de hasta 2 millones de euros, por parte de los grandes organismos del tenis. Ante este panorama, este año, el tercer Grand Slam de la temporada ha dado marcha atrás y permitirá jugar a los tenistas de estas nacionalidades siempre y cuando lo hagan bajo bandera neutral, como en el resto de torneos del circuito.
“Esto es algo que se consideró al principio. El tenis no iba realmente por ahí, pero ahora sería bastante injusto para los jugadores rusos y bielorrusos hacerlo porque se supone que esta decisión se tomó hace un año y no es la culpa de estos jugadores que tengan un pasaporte ruso o bielorruso”, dijo al respecto de las prohibiciones.
“Ahora sería injusto hacerlo, porque la decisión se tendría que haber tomado hace un año. Pero creo que hubiera ayudado a parar la agresión rusa”, concluyó la polaca.