Macri se reunirá con el emir de Qatar en Villa La Angostura
Mauricio Macri recibirá al emir de Qatar, Tamin bin Hamad Al Thani, en el exclusivo country Cumelén, ubicado a tres kilómetros de Villa La Angostura. Será un nuevo encuentro que ambos tendrán tras haber coincidido en diversas oportunidades durante el último Mundial en el país del Golfo de Pérsico, a donde el expresidente argentino acudió en condición de presidente de la Fundación FIFA.
Además de los acuerdos comerciales bilaterales como norte, el contexto electoral para poder llevarlos a cabo se apunta como tema de la cumbre en la Patagonia. El emir qatarí arribó a la Argentina tras haber pasado el Año Nuevo en Punta del Este. Lo hizo en compañía de Gastón “Gato” Gaudio, el extenista, dedicado a los negocios vinculados a la industria de los hidrocarburos y con quien el mandatario árabe mantiene una extensa relación.
Macri, cuyo destino político aún es una incógnita y en medio de las disputas de sus sucesores en Juntos por el Cambio (JxC), ha sido quizás el político argentino que más visibilidad ha tenido durante la Copa del Mundo que obtuvo la Selección Argentina en Qatar. En paralelo, ha desfilado con el líder de la monarquía que maneja el país rankeado como el quinto gas máximo productor de natural del mundo y décimo quinto de petróleo.
Vaca Muerta es uno de los ítems principales. En Argentina, la multinacional estadounidense ExxonMobil Corporation firmó un acuerdo a fines de 2018 con Qatar Energy, la firma controlada por el Estado asiático, para quedarse con el 30% de las operaciones de hidrocarburos no convencionales del yacimiento de Neuquén. “Representa la segunda reserva mundial de gas no convencional”, solía repetir Macri durante su estadía en la Casa Rosada.
Ese fue el primer paso en la industria de los hidrocarburos no convencionales de Qatar, cuyas multinacionales dependen directamente de la monarquía absoluta que la gobierna la familia Al Thani desde mediados del siglo XIX. Esto se debe a que en las tierras del Golfo Pérsico puede obtener gas convencional, sin la técnica del fracking, ya que allí los yacimientos son playos y no demandan penetraciones profundas.